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‘Nunca subestimen el extraordinario poder que hay en ustedes’: Lo que el presidente Nelson ha dicho específicamente a las mujeres

Una mirada retrospectiva a algunas de las enseñanzas del presidente Nelson a las mujeres Santos de los Últimos Días sobre su fuerza e influencia espiritual

Es imposible cuantificar la “influencia refinadora de vidas de las mujeres del convenio de Dios.”, dijo el presidente Russell M. Nelson de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días durante una transmisión mundial de la Sociedad de Socorro en marzo.

“Hermanas, por favor, nunca subestimen el extraordinario poder que hay en ustedes de influir en los demás para bien. … Si el mundo perdiera alguna vez la rectitud moral de sus mujeres, nunca se recuperaría”, declaró.

En su mensaje titulado “La influencia de las mujeres”, el presidente Nelson, un cirujano cardíaco de renombre mundial que sirvió como apóstol durante 34 años antes de ser apartado como el decimoséptimo presidente de la Iglesia en enero de 2018, identificó a dos personas que han influido en él más que nadie.

“Amo a mis hermanos y valoro el privilegio de trabajar con ellos; sin embargo, las dos personas en la tierra que más han influido en mí son mi esposa Dantzel, la madre de nuestros diez hijos, que falleció repentinamente a los setenta y ocho años, y, durante los últimos dieciocho años, mi maravillosa esposa, Wendy. …

“¡Ellas me han cambiado la vida!”, dijo. “Han hecho mi vida más completa”.

El presidente Russell M. Nelson habla durante un devocional mundial de la Sociedad de Socorro el 17 de marzo de 2024. | The Church of Jesus Christ of Latter-day Saints

El presidente Nelson explicó que las mujeres que han hecho convenios con Dios tienen receptividad al Espíritu y una “brújula moral aumentada” que les da la capacidad de recibir revelación personal y discernir la verdad del error.

“Hermanas, necesitamos que sus voces enseñen la doctrina de Cristo. Necesitamos su capacidad como mujeres de detectar el engaño y expresar la verdad. Necesitamos su sabiduría inspirada en sus consejos de familia, de barrio y de estaca, así como en otros lugares de influencia en todo el mundo. ¡Sus familias, la Iglesia y el mundo las necesitan!”.

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Como profeta y presidente de la Iglesia, el presidente Nelson ha expresado repetidamente su respeto por las mujeres, ha enseñado acerca de su fuerza e influencia espirituales y las ha alentado a estar a la altura de sus privilegios divinos.

A continuación compartimos un vistazo de algunos de sus mensajes dirigidos específicamente a las mujeres.

‘Den forma al futuro ayudando a recoger al Israel disperso’

Durante su segunda conferencia general como presidente de la Iglesia, el presidente Nelson instó a las mujeres “con toda la esperanza de [su] corazón” a orar para comprender sus dones espirituales, “para que los cultiven, utilicen y expandan, mucho más que nunca”.

“A medida que lo hagan, cambiarán el mundo”, dijo en su discurso “La participación de las hermanas en el recogimiento de Israel”, pronunciado durante la sesión general de mujeres de octubre de 2018.

El presidente Nelson extendió “una súplica profética” a las mujeres de la Iglesia “para que den forma al futuro ayudando a recoger al Israel disperso”. Las invitó a realizar un ayuno de 10 días de las redes sociales, leer el Libro de Mormón antes de fin de año, asistir al templo con regularidad y participar plenamente en la Sociedad de Socorro.

También brindó algunos antecedentes sobre dos anuncios importantes hechos en la conferencia general anterior: la ministración y los cuórums del sacerdocio reestructurados (ambos en inglés), y cómo las mujeres “fueron clave en los dos”.

“La inclinación a ministrar es inherente en las mujeres rectas”, dijo, y agregó: “Cuando ustedes percibían que una hermana a quien visitaban necesitaba ayuda, respondían de inmediato y después a lo largo del mes. Por tanto, fue la forma en que ustedes eran maestras visitantes lo que inspiró que nos eleváramos hacia la ministración”.

Además, mientras los líderes de la Iglesia tenían dificultades para encontrar la manera de ayudar a los hombres de la Iglesia a ser más eficaces en sus responsabilidades, “consideramos detenidamente el ejemplo de la Sociedad de Socorro”, dijo el presidente Nelson.

Mujeres de diversas edades y etapas de la vida se reúnen en la Sociedad de Socorro. “Cada década de la vida trae desafíos únicos, y sin embargo, ustedes, semana tras semana, se reunían, crecían y se enseñaban el Evangelio juntas, y marcaban una verdadera diferencia en el mundo”.

Las mujeres se reúnen afuera antes del inicio de la sesión general de mujeres de la Conferencia General Semestral N° 188 de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, celebrada en el Centro de Conferencias en el centro de Salt Lake City el 6 de octubre de 2018. | Laura Seitz, Deseret News

“Ahora, siguiendo su ejemplo, los portadores del Sacerdocio de Melquisedec son miembros del cuórum de élderes”, dijo. Con una amplia variedad de edades y experiencia en la Iglesia, “estos hermanos ahora pueden establecer vínculos fraternales más fuertes, aprender juntos y bendecir a los demás con más eficacia”.

El presidente Nelson concluyó: “Mis queridas hermanas, ¡necesitamos de ustedes! Necesitamos ‘de su fortaleza, su conversión, su convicción, su capacidad para dirigir, su sabiduría y sus voces’”.

Que puedan comprender el poder del sacerdocio con el que han sido investidas

Un año después, en la sesión general de mujeres de octubre de 2019, apenas tres días después de anunciar un cambio de política histórico que permitiría a mujeres, jóvenes y niños servir como testigos de las ordenanzas de sellamiento y bautismo, el presidente Nelson enseñó a las mujeres sobre el poder del sacerdocio, los convenios y los santos templos.

“Los cielos están abiertos de igual manera para las mujeres que han sido investidas con el poder de Dios que procede de sus convenios del sacerdocio como para los hombres que son poseedores de dicho sacerdocio”, dijo en su discurso titulado “Tesoros espirituales”.

“Ruego que esa verdad se grabe en el corazón de cada una de ustedes, porque creo que les cambiará la vida. Hermanas, ustedes tienen el derecho a recurrir libremente al poder del Salvador para ayudar a su familia y a otros seres queridos”.

El presidente Nelson pidió a las mujeres que, con oración, estudien Doctrina y Convenios 25 y todas las verdades que puedan encontrar sobre el poder del sacerdocio.

“Conforme aumente su comprensión y ejerzan fe en el Señor y en el poder de Su sacerdocio, aumentará su capacidad para recurrir a ese tesoro espiritual que el Señor ha puesto a su alcance”, prometió. “Al hacerlo, se encontrarán en mejores condiciones para ayudar a crear familias eternas que estén unidas, selladas en el templo del Señor y llenas de amor por nuestro Padre Celestial y Jesucristo”.

El presidente Nelson advirtió que el adversario constantemente ideará obstáculos para impedir que las mujeres comprendan los dones espirituales con los que han sido y pueden ser bendecidas.

“Desafortunadamente, algunos obstáculos pueden ser el resultado del mal comportamiento de otra persona”, dijo. “Me entristece pensar que alguna de ustedes se haya sentido excluida o que un líder del sacerdocio no le haya creído, o que haya sido víctima de abuso o traición por parte de su esposo, su padre o un supuesto amigo. Siento profundo dolor por el hecho de que alguna de ustedes se haya sentido marginada, insultada o juzgada erróneamente. Tales ofensas no tienen lugar en el Reino de Dios”.

Por el contrario, el presidente Nelson dijo que se emociona cuando se entera de líderes del sacerdocio que buscan con entusiasmo la participación de mujeres en los consejos de barrio y de estaca. “Me inspira cada esposo que demuestra que su responsabilidad más importante del sacerdocio es cuidar a su esposa. Elogio al hombre que respeta profundamente la capacidad de su esposa para recibir revelación y la atesora como compañera, en igualdad de condiciones, en su matrimonio”.

Julie Beck canta con otros asistentes a la conferencia durante la sesión del sábado por la mañana de la Conferencia General Semestral N° 189 de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en el Centro de Conferencias de Salt Lake City el sábado, 5 de octubre de 2019. | Jeffrey D. Allred, Deseret News

Desde el principio, las mujeres han sido bendecidas con una brújula moral singular, afirmó. “Mis queridas hermanas, su habilidad para discernir la verdad del error, para ser las guardianas de la moral en la sociedad, es crucial en estos últimos días”.

Para concluir, el presidente Nelson pronunció una bendición “que puedan comprender el poder del sacerdocio con el que han sido investidas y que aumenten ese poder ejercitando su fe en el Señor y en Su poder”.

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‘Ustedes son las mujeres que él predijo’

Durante la sesión general de mujeres de abril de 2022, los líderes de la Iglesia compartieron un video sobre el papel de la mujer, con palabras del presidente Spencer W. Kimball, duodécimo presidente de la Iglesia, y del presidente Nelson. El video, publicado en mayo de 2021, se titula “Ustedes son las mujeres que él predijo”.

Las palabras del presidente Kimball, leídas durante la reunión general de mujeres de octubre de 1979 por la hermana Camilla Kimball mientras estaba en el hospital, predicen que gran parte del crecimiento importante que experimentará la Iglesia en los últimos días se deberá a que muchas de las buenas mujeres del mundo serán atraídas a la Iglesia en grandes cantidades.

“Hoy es el día que predijo el presidente Kimball. ¡Ustedes son las mujeres que él predijo!”, dijo en el video el presidente Nelson, entonces presidente del Cuórum de los Doce Apóstoles. Sus comentarios provienen de su discurso de la conferencia general de octubre de 2015, “Una súplica a mis hermanas”.

“¡Su virtud, luz, amor, conocimiento, valor, carácter, fe y rectitud atraerán a las buenas mujeres del mundo, junto con las familias de ellas, a la Iglesia en cantidades sin precedente!”.

El presidente Nelson dijo que el reino de Dios no es ni puede estar completo sin mujeres que hagan y guarden convenios y que puedan hablar con el poder y la autoridad de Dios.

Continuó: “Mis queridas hermanas, sea cual sea su llamamiento, sin importar sus circunstancias, necesitamos sus impresiones, sus reflexiones y su inspiración. … Casadas o solteras, ustedes, hermanas, poseen capacidades singulares y una intuición especial que han recibido como dones de Dios. Nosotros, los hermanos, no podemos reproducir la influencia sin igual que tienen ustedes. …

“Les doy las gracias, mis estimadas hermanas, y las bendigo para que se eleven a su pleno potencial, para que cumplan la medida de su creación, conforme caminamos codo a codo en esta obra sagrada. Juntos ayudaremos a preparar el mundo para la segunda venida del Señor”.

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