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El poder de las mujeres que guardan los convenios se celebra durante la reunión mundial del aniversario de la Sociedad de Socorro

‘Hermanas, ustedes tienen un don divino que les permite literalmente cambiar vidas’, dice el presidente Nelson mientras él y la presidencia general de la Sociedad de Socorro se dirigen a las mujeres antes de las reuniones locales de testimonio

En el 182° aniversario de la organización de la Sociedad de Socorro de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, mujeres de todo el mundo se reunieron para escuchar mensajes del Presidente de la Iglesia Russell M. Nelson y de la presidencia general de la Sociedad de Socorro, y para dar testimonio del Señor Jesucristo.

La Sociedad de Socorro, una de las organizaciones de servicio más grandes y antiguas del mundo, se organizó el 17 de marzo de 1842, durante la construcción del templo de Nauvoo y en anticipación de las ordenanzas y convenios que se ofrecerían allí, explicó la presidenta general de la Sociedad de Socorro, Camille N. Johnson.

“Ahora, en esta época de construcción de templos sin precedentes, el objetivo de la Sociedad de Socorro sigue siendo el mismo: preparar a un pueblo temporal y espiritualmente para las bendiciones de la casa del Señor”, dijo la presidenta Johnson en su discurso de apertura.

Todas las hermanas de la Sociedad de Socorro que entran en una relación de convenio con Dios pueden tener acceso a esas bendiciones — incluido Su poder del sacerdocio.

“Ninguna organización mundana puede articular una plataforma divinamente designada comparable a la de la Sociedad de Socorro”, dijo.

Agradecimiento, invitación y bendiciones del presidente Nelson para las mujeres

En sus comentarios, el presidente Nelson dijo que está profundamente agradecido con las hermanas de la Sociedad de Socorro. Dijo que gran parte del bien que logra la Iglesia — y gran parte del bien que se realiza en el mundo — se debe a las mujeres.

Agradeció a las mujeres por su devoción al Señor y sus esfuerzos por ennoblecer a los demás.

“Me maravillo de su fe y sensibilidad hacia las cosas del Espíritu. Me inspira su diligencia, liderazgo dinámico y su capacidad para ver una necesidad y satisfacerla. ... Toda la misión de la Iglesia del Señor se ve fortalecida por ustedes”.

Dijo que las mujeres tienen un don divino que les permite literalmente cambiar vidas, particularmente mientras trabajan en el recogimiento de Israel.

“Cada vez que ayudamos a alguien a encontrar la senda de los convenios y a permanecer en ella, estamos ayudando en el recogimiento de Israel. Nadie hace esto mejor que ustedes — como madres, líderes, maestras, hermanas y amigas. Están preparando a las generaciones futuras de la Iglesia del Señor y del mundo”.

President Russell M. Nelson speaks to women during the worldwide Relief Society devotional for the 182nd anniversary.
El presidente Russell M. Nelson habla a las mujeres durante el devocional mundial de la Sociedad de Socorro por el 182° aniversario el domingo, 17 de marzo de 2024. | Screenshot from ChurchofJesusChrist.org

Si bien dijo que ama a sus hermanos y valora trabajar con ellos, las dos personas que más lo han influido en él son su difunta esposa, Dantzel, quien murió a los 78 años, y, durante los últimos 18 años, su esposa Wendy.

“Han cambiado mi vida”, dijo. “Han hecho que mi vida sea más completa”.

Las mujeres han estado en el centro del plan del Padre Celestial desde el principio. Las hijas del convenio de Dios tienen una receptividad al Espíritu y una brújula moral mejorada, dijo.

“Hermanas, por favor nunca subestimen el extraordinario poder que hay dentro de ustedes para influir en los demás para bien... si el mundo alguna vez perdiera la rectitud moral de sus mujeres, el mundo nunca se recuperaría”.

Las voces de las hermanas son necesarias para enseñar la doctrina de Cristo, detectar el engaño y articular la verdad. La sabiduría de las mujeres es necesaria en sus familias, en los consejos de barrio y de estaca y en otros lugares de influencia en todo el mundo.

El presidente Nelson invitó a las mujeres a hacer de las Escrituras su Liahona personal, del templo su lugar de refugio y recalibración, y de sus oraciones personales la manera en que aprenden dónde necesita el Señor que estén ese día. Con el tiempo, dijo, verán cómo el Señor las guía para ayudar a los demás.

Luego, ofreció las siguientes bendiciones para las mujeres:

  • Un mayor discernimiento espiritual y la capacidad de encontrar gozo al ofrecer alivio a los demás.
  • Sabiduría para discernir lo que es necesario y no correr más deprisa de lo que pueden.
  • Valor para vivir de acuerdo con los privilegios divinos como hijas del convenio de Dios.
  • Sentir profundamente que el Padre Celestial y Su Hijo Jesucristo las conocen y las aman.
  • Darse cuenta de que sus dones divinos como hijas de Dios les dan el poder no sólo de cambiar vidas sino de cambiar el mundo.

La presidenta Johnson invita a las mujeres a entrar en una relación de convenio con Dios

La presidenta Camille N. Johnson, presidenta general de la Sociedad de Socorro, habla durante la filmación en el Edificio de la Sociedad de Socorro en Salt Lake City, el jueves, 1 de febrero de 2024, de un devocional mundial de la Sociedad de Socorro transmitido el 17 de marzo de 2024. | Kristin Murphy, Deseret News

La presidenta Johnson compartió cómo el Profeta ha enseñado repetidamente que cuando las personas se unen a Jesucristo mediante convenios sagrados del sacerdocio en la casa del Señor, pueden recurrir al poder de Dios y nunca necesitan sentirse solas.

Todos entran en la senda de los convenios en el bautismo y luego lo hacen de manera más completa en el templo, dijo, mientras invitaba a las mujeres a prepararse para recibir las bendiciones de la investidura en la casa del Señor.

Se invitó a las jóvenes que cumplen 18 años este año a ver la transmisión con sus barrios o estacas locales. La presidenta Johnson explicó que las hermanas dignas podrán recibir su propia investidura si tienen al menos 18 años de edad; haber terminado o ya no asistir a la escuela secundaria, o equivalente; que haya transcurrido un año completo desde su confirmación; y sienten el deseo de recibir y honrar los convenios del templo durante toda su vida. No tienen que esperar hasta el matrimonio.

“Hermanas, si están investidas, permanezcan recomendadas al Señor manteniendo su recomendación al día y asistiendo a la casa del Señor regularmente. El Señor está haciendo que Sus templos sean más accesibles a Sus hijos del convenio”.

La presidenta Johnson compartió un momento en el que se dirigió a una conferencia de mujeres en Corea del Sur. Casi 1400 hermanas de la Sociedad de Socorro se reunieron para el evento.

Al final de la reunión, una hermana que estaba cerca a la presidenta Johnson le susurró: “Él te ama”. Más tarde, la mujer le dijo a la presidenta Johnson que cuando compartió ese mensaje de amor, ella también sintió una confirmación del Espíritu del amor de Dios por ella.

“Mi nueva amiga, mi hermana de la Sociedad de Socorro que vive en Corea del Sur, me brindó alivio espiritual al comunicarme el amor de Jesucristo y fue bendecida al encontrar su propio alivio en Él, una confirmación del amor perdurable del Salvador por ella”, dijo la presidenta Johnson. “Como ven, cuando llevamos el alivio del Salvador a los demás, lo encontramos para nosotros mismos”.

Junto a sus consejeras, la presidenta Johnson testificó que las mujeres tienen un papel vital que desempeñar en la preparación del mundo para la Segunda Venida, y que todas tienen acceso al poder del sacerdocio de Dios para llevar a cabo esa obra.

President Camille N. Johnson, Sister J. Anette Dennis, and Sister Kristin M. Yee, at the filming of a worldwide Relief Society devotional.
De izquierda a derecha, la hermana J. Anette Dennis, primera consejera de la presidencia general de la Sociedad de Socorro; la presidenta Camille N. Johnson, presidenta general de la Sociedad de Socorro; y la hermana Kristin M. Yee, segunda consejera de la presidencia general de la Sociedad de Socorro, son filmadas para un devocional mundial de la Sociedad de Socorro, en el Edificio de la Sociedad de Socorro en Salt Lake City, el jueves, 1 de febrero de 2024. El devocional se transmitió el domingo, 17 de marzo de 2024. | Kristin Murphy, Deseret News

La hermana Dennis describe el poder del sacerdocio

La hermana J. Anette Dennis, primera consejera de la presidencia general de la Sociedad de Socorro, dijo que las hijas de Dios pueden recibir el poder del sacerdocio, — el poder de Dios que llega a quienes hacen y guardan los convenios del sacerdocio.

“El poder del sacerdocio de Dios amplificará nuestros dones y talentos espirituales, nos dará una fuerza más allá de la nuestra para llevar las pesadas cargas de la mortalidad y nos dará la paz y el poder que necesitamos al enfrentar los terremotos físicos, emocionales y espirituales de nuestras vidas. Este poder que fluye de nuestros convenios puede bendecir nuestras vidas de muchas maneras diferentes porque es el poder de Dios”.

Las madres pueden recurrir a Su poder para obtener mayor capacidad, energía y dirección. Aquellas que han perdido a un ser querido pueden invocar Su poder para sentirse reconfortadas y sostenidas. El poder de Dios también puede dar esperanza a quienes enfrentan circunstancias difíciles en la vida.

La hermana J. Anette Dennis, primera consejera de la presidencia general de la Sociedad de Socorro, habla durante la filmación de un devocional mundial de la Sociedad de Socorro en el Edificio de la Sociedad de Socorro en Salt Lake City, el jueves 1 de febrero de 2024. El devocional se transmitió el domingo. 17 de marzo de 2024. | Kristin Murphy, Deseret News

Las mujeres que son llamadas y apartadas o asignadas para ayudar con la obra de Dios también reciben autoridad del sacerdocio — la autoridad de Dios para representarlo a Él mientras cumplen con sus llamamientos y asignaciones.

El adversario trata de cegar a las mujeres en cuanto a lo que son y lo que tienen. Pero la hermana Dennis dijo que no conoce ninguna otra organización religiosa en el mundo que haya otorgado poder y autoridad a las mujeres de manera tan amplia. “Todas las mujeres mayores de 18 años en la Iglesia de Jesucristo que eligen una relación de convenio con Dios en la casa del Señor son investidas con el poder del sacerdocio directamente de Dios”.

“Y al servir en cualquier llamamiento o asignación, incluyendo las asignaciones de ministrar, se nos otorga la autoridad del sacerdocio para llevar a cabo esas responsabilidades. Mis queridas hermanas, ustedes pertenecen a una Iglesia que ofrece a todas sus mujeres el poder y la autoridad del sacerdocio de Dios”, dijo la hermana Dennis.

La hermana Yee testifica: ‘Nunca estamos solas’

Cada mujer tiene la oportunidad de asociarse con el Señor de una manera poderosa por medio de sus convenios, y su propósito es llegar a ser una con Dios por medio de esos convenios, enseñó la hermana Kristin M. Yee, segunda consejera de la presidencia general de la Sociedad de Socorro.

“Nunca estamos solas. No necesitamos afrontar solas los desafíos, las incertidumbres y las flaquezas de la vida. Él estará a nuestro lado; esta es nuestra promesa y bendición del convenio”.

Una asociación a través de los convenios es real, testificó.

“Como hermana que aún no me he casado, esta relación de convenio con Dios tiene un lugar importante en mi vida y es la fuente de mi paz, seguridad, gozo y dirección. Nuestro Padre Celestial y Salvador desea estas bendiciones para cada una de nosotras sin importar nuestras circunstancias. Ellos las ven y conocen su camino”.

La hermana Kristin M. Yee, segunda consejera de la presidencia general de la Sociedad de Socorro, habla durante la filmación de un devocional mundial de la Sociedad de Socorro, en el Edificio de la Sociedad de Socorro en Salt Lake City, el jueves 1 de febrero de 2024. El devocional se transmitió el domingo. 17 de marzo de 2024. | Kristin Murphy, Deseret News

La hermana Yee dijo que guardar los convenios cambia la naturaleza de uno para llegar a ser como Jesucristo. Invitó a las mujeres a desarrollar una relación de convenio con Dios e invertir en esa relación viviendo sus convenios y pasando tiempo con el Salvador en el templo, en oración, en estudio y en ministración.

Aunque actualmente no está casada, la hermana Yee dijo que no necesariamente se considera soltera. Hay mucho más para todas las hijas de Dios que un estado civil o una etiqueta demográfica. Las mujeres del convenio de la Sociedad de Socorro pueden crear un hogar donde more el Espíritu y crear lugares seguros y protegidos del mundo.

Todas las mujeres son cuidadoras de todos dentro de sus esferas.

“Queridas hermanas, su influencia es grande y se necesita de sus dones. Miren las vidas de quienes le rodean y de aquellos a quienes el Señor ha puesto dentro de su influencia”.

Qué significa pertenecer a la Sociedad de Socorro

La transmisión comenzó con las nueve mujeres oficiales generales de la Iglesia paradas juntas. La presidenta general de la Primaria, Susan H. Porter, dijo que si bien para esta temporada está llamada a ayudar a los niños de la Iglesia a venir a Cristo, está agradecida de ser siempre un miembro de la Sociedad de Socorro.

“Ser miembro de la Sociedad de Socorro me ha permitido aprender de mujeres consagradas de todo el mundo lo que significa amar y servir como el Salvador”, dijo la presidenta Porter.

La presidenta general de las Mujeres Jóvenes, Emily Belle Freeman, habló sobre una hermana ministrante que le inculcó la creencia en el alivio que proviene de una sociedad que sigue a Jesucristo.

“Ella me enseñó que no importa dónde sirva en la Iglesia, la Sociedad de Socorro será mi hogar”, dijo la presidenta Freeman.

Representación artística de José Smith, con Emma Smith, organizando la Sociedad de Socorro en Nauvoo, Illinois, el 17 de marzo de 1842. | The Church of Jesus Christ of Latter-day Saints

La presidenta Johnson dijo que del pequeño grupo de 20 mujeres reunidas en Nauvoo, Illinois, en 1842, ha crecido una organización global de casi 8 millones de mujeres. Y la Sociedad de Socorro está liderando la iniciativa humanitaria global de la Iglesia para atender las necesidades de las mujeres y los niños.

Estas necesidades se priorizan a través de la atención materna y neonatal, los esfuerzos de nutrición infantil, las inmunizaciones y la educación en todo el mundo. Y la mejor ayuda humanitaria es la que a menudo se presta a los más cercanos en actos cotidianos de bondad. La presidenta Johnson agradeció a las mujeres por servir como lo haría el Salvador.

“Hermanas, están cumpliendo su mandato divino como miembros de la Sociedad de Socorro cada vez que hacen algo para brindar alivio a los demás — temporal o espiritual — porque les están brindando el amor de Jesucristo.

“Testifico que al hacerlo, serán bendecidas al encontrar su propio alivio en Él. Jesucristo es nuestro socorro. Y usted pertenece a la Sociedad de Socorro”.

La presidenta Camille N. Johnson, presidenta general de la Sociedad de Socorro, conversa con la hermana Kristin M. Yee, segunda consejera de la presidencia general de la Sociedad de Socorro, durante una pausa en la filmación de un devocional mundial de la Sociedad de Socorro, en el Edificio de la Sociedad de Socorro en Salt Lake City, el jueves, 1 de febrero de 2024. | Kristin Murphy, Deseret News
President Camille N. Johnson, Sister J. Anette Dennis, and Sister Kristin M. Yee, hug while taking a break in the filming of a worldwide Relief Society devotional.
De izquierda a derecha, la presidenta Camille N. Johnson, presidenta general de la Sociedad de Socorro; la hermana J. Anette Dennis, primera consejera de la presidencia general de la Sociedad de Socorro; y la hermana Kristin M. Yee, segunda consejera de la presidencia general de la Sociedad de Socorro, se abrazan mientras toman un descanso durante la filmación de un devocional mundial de la Sociedad de Socorro, en el Edificio de la Sociedad de Socorro en Salt Lake City, el jueves, 1 de febrero de 2024. | Kristin Murphy, Deseret News
De izquierda a derecha, la hermana Tracy Y. Browning, segunda consejera de la presidencia general de la Primaria; la hermana Amy A. Wright, primera consejera de la presidencia general de la Primaria; Presidenta Susan H. Porter, presidenta general de la Primaria; la hermana J. Anette Dennis, primera consejera de la presidencia general de la Sociedad de Socorro; la presidenta Camille N. Johnson, presidenta general de la Sociedad de Socorro; la hermana Kristin M. Yee, segunda consejera de la presidencia general de la Sociedad de Socorro; la presidenta Emily Belle Freeman, presidenta general de las Mujeres Jóvenes; la hermana Tamara W. Runia, primera consejera de la presidencia general de las Mujeres Jóvenes; y la hermana Andrea Muñoz Spannaus, segunda consejera de la presidencia general de las Mujeres Jóvenes, saludan con la mano una publicación en las redes sociales durante la filmación de un devocional mundial de la Sociedad de Socorro, en el Edificio de la Sociedad de Socorro en Salt Lake City, el jueves, 1 de febrero de 2024. | Kristin Murphy, Deseret News
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