En su mensaje final de la conferencia general de abril de 2024, el presidente Russell M. Nelson anunció las ubicaciones de 15 nuevos templos de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, lo que eleva el número total de casas del Señor de la Iglesia a 350 en todo el mundo, 168 de las cuales el presidente Nelson ha anunciado durante los últimos seis años.
“El templo es la puerta de entrada a las mayores bendiciones que Dios tiene para cada uno de nosotros. El templo es el único lugar en la tierra donde podemos recibir todas las bendiciones prometidas a Abraham”, dijo el domingo, 7 de abril por la tarde en el Centro de Conferencias de Salt Lake City.
“Es por eso que estamos haciendo todo lo posible en nuestro poder, bajo la dirección del Señor, para que las bendiciones del templo sean más accesibles para los miembros de la Iglesia. Por lo tanto, nos complace anunciar que planeamos construir un nuevo templo en cada uno de los siguientes 15 lugares”.
Las 15 nuevas ubicaciones de templos identificadas por el presidente Nelson, son:
- Uturoa, Polinesia Francesa
- Chihuahua, México
- Florianópolis, Brasil
- Rosario, Argentina
- Edimburgo, Escocia
- Área Sur de Brisbane, Australia
- Victoria, Columbia Británica
- Yuma, Arizona
- Área Sur de Houston, Texas
- Des Moines, Iowa
- Cincinnati, Ohio
- Honolulu, Hawái
- West Jordan, Utah
- Lehi, Utah
- Maracaibo, Venezuela
Con el anuncio del domingo, la Iglesia ahora tiene un total de 350 templos — dedicados, en construcción o anunciados y en planificación.
Los 350 incluyen:
- 189 templos dedicados.
- 7 templos programados para su dedicación.
- 45 templos en construcción.
- 1 templo programado para la palada inicial.
- 108 templos anunciados y en planificación y diseño.
El presidente Nelson señaló en su mensaje del domingo por la tarde que cuando él nació, el 9 de septiembre de 1924, la Iglesia contaba con seis templos en funcionamiento — en St. George, Logan, Manti y Salt Lake City, Utah; así como en Laie, Hawái y Cardston, Alberta, Canadá.
Sumando las 15 nuevas ubicaciones, el presidente Nelson ha anunciado 168 nuevos templos desde que fue sostenido como Presidente de la Iglesia en enero de 2018.
Los 168 incluyen:
- 9 templos dedicados.
- 2 templos programados para su dedicación.
- 44 templos en construcción.
- 1 templo programado para la palada inicial.
- 36 templos con ubicaciones de sitio identificadas.
- 76 templos anunciados en planificación y diseño.
Las 15 nuevas casas del Señor eventualmente serán construidas, dedicadas y ayudarán a bendecir las vidas de los Santos de los Últimos Días que viven en esas áreas y sus alrededores. Sin embargo, en su discurso de clausura de la conferencia del domingo, el presidente Nelson brindó a los miembros de la Iglesia de todo el mundo invitaciones y promesas de regocijarse ahora en el don de las llaves del sacerdocio, especialmente aquellas que tienen que ver con la adoración y las ordenanzas de salvación y exaltación del templo.
Invitó a sus oyentes a leer la oración dedicatoria del profeta José Smith para el Templo de Kirtland, que se encuentra en la sección 109 de Doctrina y Convenios, y la llamó “un tutorial sobre cómo el templo nos fortalece espiritualmente a ustedes y a mí para afrontar los desafíos de la vida en estos últimos días”.
Aquellos que sirven y adoran en la casa del Señor, añadió, “pueden esperar recibir respuestas a sus oraciones, revelación personal, mayor fe, fortaleza, consuelo, mayor conocimiento y mayor poder”.
Volvió a abordar el tema “Piensen de manera celestial”, que presentó hace seis meses en la conferencia general de octubre de 2023. “El tiempo en el templo les ayudará a ‘pensar de manera celestial’ y a tener una visión de quienes son realmente, en quién se pueden convertir y el tipo de vida que pueden tener para siempre. La adoración regular en el templo mejorará la manera en que se ven a sí mismos y cómo encajan en el magnífico plan de Dios. Se los prometo”.
Después de enumerar las bendiciones prometidas en la sección 109, el presidente Nelson agregó, “Esta es mi promesa: nada les ayudará más a aferrarse a la barra de hierro que adorar en el templo con la regularidad que sus circunstancias lo permitan. Nada les protegerá más cuando se encuentren con las brumas de oscuridad del mundo. Nada reforzará su testimonio del Señor Jesucristo y Su expiación ni les ayudará a comprender más el magnífico plan de Dios. Nada calmará más su espíritu en momentos de dolor. Nada abrirá más los cielos... nada”.