Durante el campamento anual de las Mujeres Jóvenes del Barrio Piedmont de la Estaca Marietta Georgia que se llevó a cabo el pasado mes de junio, las jóvenes tuvieron la oportunidad de combinar dos de sus cosas favoritas: el piragüismo (kayaking) y el servicio.
Las mujeres jóvenes fueron al Lago Unicoi y, utilizando kayaks y tablas de paddle surf, limpiaron la basura del agua y la orilla.
A la joven Ashton Dance le encantó que pudieran divertirse tanto mientras realizaban un proyecto de servicio.
Cuando le preguntaron sobre la importancia del servicio, Caylee García dijo que dar a los demás con absoluto amor, es fundamental: “Una vida con propósito es una vida de servicio”, dijo.
Mientras tanto, en agosto, las jóvenes del Barrio Panamericano de la Estaca Delicias México llevaron a cabo su campamento en una granja den el estado de Chihuahua. Su tema fue “Discípulas de Cristo”.
Prepararon sus comidas, escucharon a su obispo sentadas alrededor de una fogata, hicieron una búsqueda de tesoro y participaron en talleres de primeros auxilios. Además, se despertaron al amanecer y estudiaron sobre los atributos e Jesucristo.
Carolina Fuentes, una de las líderes del campamento dijo, “Mi parte favorita fue ver el amanecer, sentir el Espíritu, compartir nuestro estudio y oír lo que cada joven sintió”.
Camila Villa dijo, “Sentí que podía hacer amigas, me sentí feliz y en calma con el deseo se ser más como Cristo”.
Las líderes compartieron cómo las jóvenes —al estar rodeadas de la belleza de la naturaleza— pudieron fortalecer su testimonio.
“Son mujeres jóvenes extraordinarias”, dijo la presidenta de las Mujeres Jóvenes, Karina García. “Conocen a su Padre Celestial y tratan de mejorar día a día. Nosotras como líderes las amamos por lo que son: hermosas hijas de un Padre que está en los Cielos”.
El propósito del campamento de las Mujeres Jóvenes
Las jóvenes necesitan un lugar donde se puedan reunir, alejadas de las influencias del mundo, sentir el Espíritu del Señor, crecer en unidad y amor, y fortalecer su fe y su testimonio del Padre Celestial y Jesucristo, explica Guía de campamento de las Mujeres Jóvenes de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
La Iglesia promueve los campamentos para las jóvenes. Se puede realizar un campamento de varios días una vez todos los años —incluso el mismo año en que se lleve a cabo la conferencia de Para la Fortaleza de la Juventud y la conferencia de jóvenes de estaca. También se pueden realizar otros campamentos de un día o de una noche para satisfacer las necesidades e intereses locales.
La hermana Tamara W. Runia, primera consejera de la presidencia general de las Mujeres Jóvenes, dijo que ha asistido 20 veces a campamentos de las jóvenes.
“Se puede hacer a nivel de barrio, lo cual hará que se sienta realmente familiar e íntimo y podría ser la base para esa cercanía durante el resto del año; o se puede hacer a nivel de estaca, lo cual representa una maravillosa oportunidad para reunir y sentir la fortaleza de la estaca”, dijo la hermana Runia.
Los líderes del sacerdocio, las líderes de las Mujeres Jóvenes y líderes de la juventud, deben deliberar juntos sobre cuál de estas opciones es mejor para ellos, dice la guía.
La hermana Scharman Grimmer, miembro del Consejo Asesor General de las Mujeres Jóvenes, estima que ha asistido a campamentos unas 15 veces.
“Sin dudas me encanta el campamento. Probablemente es una de mis actividades favoritas con las jóvenes porque siento que es un momento en el que nos alejamos del mundo y podemos estar juntas y [así] estrechar lazos”, dijo.
Otra integrante del Consejo Asesor General de las Mujeres Jóvenes, la hermana Bobbie Sandberg, dijo que ha acampado en tiendas de campaña, cabañas, en las montañas, en zonas públicas para campamentos e incluso en un edificio de la Iglesia.
“Me encantan los campamentos, porque no importa dónde vayas, puedes hacer amistades, sentir el Espíritu, fortalecer tu testimonio y divertirte mucho”, dijo.
Relató que supo de un campamento que se llevó a cabo en Hong Kong este año. Las jóvenes planearon que se haría en tiendas de campaña, pero el clima se volvió frío.
Mientras se preguntaban qué harían, su primer paso fue formar un círculo y orar. Hablaron del propósito del campamento, deliberaron entre ellas y con sus líderes y, después, revisaron el equipo para cerciorarse de que las mantendría abrigadas.
“Después de seguir estos pasos decidieron seguir adelante con el campamento y se lo pasaron muy bien. Incluso estuvieron lo suficientemente abrigadas como para poder dormir durante toda la noche”, dijo la hermana Sandberg. “Estas Mujeres Jóvenes [demostraron] fe y sabiduría cuando algo inesperado pasó en su campamento”.
Otros ejemplos de campamentos de Mujeres Jóvenes de este verano
En junio, por segundo año consecutivo, un grupo de hermanas misioneras de la Misión Michigan Lansing les habló a las jóvenes durante el campamento. Las Estacas Lansing Michigan y Holland Michigan estaban en el mismo edificio y se combinaron para la reunión con las misioneras.
Molly Stump, la presidenta de las Mujeres Jóvenes de la Estaca Lansing, dijo que uno de los aspectos más destacados de todo el campamento fue tener a las hermanas misioneras por una noche.
“Con frecuencia, muchos de nuestros barrios o unidades no tienen hermanas misioneras, así que la posibilidad de interactuar, hacerles preguntas y socializar con ellas es una experiencia única para muchas de [las jóvenes]. Como madre de una joven que fue [al campamento] el año pasado, puedo decirles que salen de allí muy inspiradas”, dijo Stump.
La Estaca Columbus Ohio Este tenía el tema “Jesucristo es mi refugio seguro” para el campamento de las Mujeres Jóvenes de junio.
Kim Birch explicó que las líderes del campamento de jóvenes, que tienen entre 16 y 18 años, planificaron el campamento e hicieron “un trabajo fantástico”. Antes del campamento, las jóvenes leyeron el discurso “Las palabras importan” que pronunció el élder Ronald A. Rasband del Cuórum de los Doce Apóstoles, durante la conferencia general de abril de 2024.
“Hicimos una caminata de fe, senderismo en el bosque, arrojamos hachas, analizamos por qué las palabras importan, hablamos sobre nuestra verdadera identidad y el plan de salvación; trajimos amigas que no eran miembros, fuimos a un lago e hicimos un circuito de desafío acuático, anduvimos en canoa, invitamos a nuestros obispos a participar en una carrera de obstáculos; jugamos, reímos y lloramos juntas, creamos amistades duraderas, fortalecimos nuestro testimonio y la relación con nuestro Salvador Jesucristo”, dijo Birch.
Como preparación para su campamento, en mayo, se animó a las mujeres jóvenes de la Estaca Cartagena Colombia a participar activamente en seminario, asistir al templo y participar en actividades de servicio.
Después, durante el campamento, tuvieron varias actividades como, deportes, pintura, un concurso de talentos, estudiaron la guía Para la Fortaleza de la Juventud y más. Todo lo cual encaja dentro de las cuatro áreas de desarrollo personal del programa Niños y Jóvenes: la social, la espiritual, la física y la intelectual.
Una de las mujeres jóvenes, Christine Gonzales, habló sobre ello: “Pudimos trabajar en otros aspectos como el aspecto social (al poder socializar con todas las jóvenes, jugar y hacer actividades); el aspecto espiritual (porque sin importar lo que hiciéramos, siempre estábamos en conexión con nuestro Padre Celestial); el aspecto físico (ya que hubo muchas actividades en las cuales pudimos mejorar en nuestro cuerpo); y el aspecto intelectual (porque hubo muchas actividades donde pudimos aprender y desarrollar otras habilidades).
El campamento fue gratificante parpa todos, dijo Eliana Villa, líder de las Mujeres Jóvenes de la estaca, “Sé que estos momentos preparados para las jóvenes son experiencias Únicas para ellas y les ayudan a mejorar su relación con Dios”.