Se están sembrando las semillas de un futuro prometedor en el Área Eurasia de La iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, testificó el élder D. Todd Christofferson del Cuórum de los Doce Apóstoles.
A medida que los Santos de los Últimos Días hagan lo posible para ser diligentes, el Señor utilizará sus esfuerzos y multiplicará el efecto de lo que hagan. “Se avecinan buenas cosas”, dijo el élder Christofferson.
El élder Christofferson ministró en Armenia, la República de Georgia y Kazajistán desde el 6 al 17 de septiembre. Miembros de la Iglesia en Rusia y Bielorrusia se unieron a las reuniones de forma presencial y también virtual.
El élder Christofferson estuvo acompañado por el élder Marcus B. Nash (en inglés) de la presidencia de los Setenta, sus respectivas esposas, la hermana Kathy Christofferson y la hermana Shelley Nash; y la presidencia del Área Eurasia, el élder Alexey V. Samaykin, y sus consejeros, el élder Nikolai Ustyuzhaninov y el élder Aleksandr A. Drachyov, todos Setentas de Área.
Tanto el élder Christofferson como el élder Nash hablaron sobre esta asignación a su regreso a Salt Lake City, y el élder Christofferson comentó las reuniones con los miembros de la Iglesia, misioneros, amigos de la iglesia y líderes locales.
“No me había dado cuenta antes, al menos no con la misma claridad, de lo beneficioso que resulta —sobre todo considerando lo dispersos que están nuestros miembros y que son relativamente pocos— el simple hecho de estar juntos”, dijo el élder Christofferson. “Daba la impresión de que traía consigo un espíritu maravilloso, y, además, creo les llenó de energía y renovó sus sentimientos de fe y esperanza”.
Y lo más importante, añadió el élder Nash, fue reunirse para escuchar a alguien que posee las llaves del sacerdocio.
“Al tener a un Apóstol presente, la gente se siente elevada y les ayuda a sentirse en conexión con la Iglesia en general”, dijo el élder Nash.
Reuniones grandes y pequeñas
La conferencia del Distrito Ereván, Armenia del domingo 8 de septiembre, llenó un salón de baile y congregó a uno de los grupos más numerosos de miembros que se hayan reunido en un mismo lugar en Armenia en mucho tiempo. Los miembros miran hacia el futuro y tienen esperanza gracias a Jesucristo, dijo el élder Christofferson.
Una semana más tarde, en Almaty, Kazajistán, un devocional para miembros que se celebró el domingo 15 de septiembre, atrajo miembros de todo Kazajistán y además se transmitió a centros de reuniones y lugares en Rusia y Bielorrusia.
A las reuniones de misioneros celebradas en Ereván, Armenia el miércoles 11 de septiembre, asistieron unos 60 que sirven en la Misión Armenia/Georgia y otros 20 de la Misión Rusia Moscú.
El estar juntos, ser parte de un grupo grande y estar con un Apóstol fue “magnífico”, dijo el élder Nash. “Creo que les ayuda a saber que los hermanos se acuerdan de ellos, se preocupan por ellos y saben de su existencia”.
También se llevó a cabo otra reunión de misioneros en Almaty, Kazajistán, el viernes 13 de septiembre. En estos momentos sirven en la Misión Rusia Ekaterimburgo seis jóvenes misioneros de tiempo completo y una pareja de misioneros mayores. Estos ocho más dos hombres jóvenes que recibieron su llamamiento misional, se reunieron con el élder Christofferson, el élder Nash, sus respectivas esposas, el élder Samaykin y los líderes de misión.
Era un grupo tan pequeño que se sentaron en un semicírculo, contestaron preguntas, enseñaron el evangelio y compartieron juntos.
Los amigos de la Iglesia se unieron a los miembros durante el devocional con el élder Christofferson en Tiflis, República de Georgia, en la noche del 11 de septiembre.
En la República de Georgia, actualmente, solo existe una rama de la Iglesia —pero es la nueva generación que está ayudando a la Iglesia a crecer, dijo el élder Nash.
“Fue una reunión impactante, y esos amigos, al igual que los miembros, estaban llenos de entusiasmo”, dijo el élder Nash. “Les encantó lo que sintieron, y muchos se acercaron después profundamente conmovidos”.
La mayor parte del tiempo que el élder Christofferson estuvo en Kazajistán, lo destinó a reunirse con el liderazgo. Los Setentas de Área, líderes de misión, presidentes de distrito, presidentes de estaca, consejeros, mujeres líderes de organizaciones de Rusia y Kazajistán se congregaron en Almaty el 14 de septiembre para recibir instrucción y capacitación.
Las reuniones fueron inspiradoras y energizantes, dijo el élder Christofferson, especialmente para aquellos líderes de Rusia que se encuentran esparcidos a lo largo de uno de los países geográficamente más grandes del mundo.
Durante el devocional en Almaty, el élder Christofferson testificó del plan de salvación y les dijo a los miembros que no tuvieran miedo de compartir el evangelio con los demás de forma normal y natural.
“Las pequeñas acciones de hoy florecerán en un futuro no tan lejano [y se convertirán] en grandes acontecimientos anunciados por los profetas bíblicos y del Libro de Mormón”, prometió.
Los invitó a llevar un registro de sus oraciones y de las respuestas que recibieran por el bien de sus hijos y nietos, diciendo que ese registro será importante para el futuro. “Es uno de los medios pequeños y sencillos que el Señor utilizará para bendecir a la posteridad de ustedes y más allá”.

Lo que aprendieron los miembros y los misioneros
En Armenia, Vahan Tadevosian se sintió conmovido cuando escuchó al élder Christofferson hablar sobre la manera en que fue llamado a ir al país y cómo sigue la guía de Dios.
“Esto me impactó, porque entre mis talentos como persona no está el planificar las acosas con muchos años de antelación, pero a lo largo de mi vida siempre he sentido que el Espíritu Santo me guiará, aunque yo mismo no lo planifique”, dijo Tadevosian.
Ralph Hovsepian dijo que sintió el Espíritu mientras escuchaba al élder Christofferson. “Sé que el Señor está haciendo Su obra mediante él y los otros Apóstoles.
El élder Parker Burk escribió que estuvo ayunando y orando antes de la reunión con los misioneros en Armenia con una pregunta específica en mente. “Sentí que el Espíritu me invadía de una manera tan intense que capto mi atención inmediatamente. Entonces fue cuando el élder Christofferson abordó mi pregunta de una manera muy sencilla que sólo yo reconocería”.
Lo más destacado para la hermana Brie Ericksen fue la importancia de olvidarse de uno mismo, y, además, aprendió a invitar más al Espíritu al enseñar. “Y cuando hacemos esto, la gente a nuestro alrededor ‘comenzará a creer en el Hijo de Dios, que vino a redimir a su pueblo, y que sufrió y murió para expiar nuestros pecados y levantarse de entre los muertos’”, tal y como lo compartió el élder Christofferson en Alma 33:22.
En Georgia, Frank Kantaria se sintió bendecido por recibir la visita de un Apóstol de Jesucristo y expresó su agradecimiento por el inspirado liderazgo y el ánimo para seguir al Salvador que ofreció.
“Sus palabras y presencia trajeron un innegable espíritu de paz e inspiración, haciéndonos recordar el infinito amor del Salvador y la función vital que tienen Sus siervos escogidos”, dijo Kantaria.
Los misioneros en Kazajistán compartieron, también, sus pensamientos con Church News a través del correo electrónico. El élder Code Shumway dijo que uno de los mensajes más contundentes que se llevó de la reunión fue “que esta no es nuestra obra; es la obra del Señor, y cuando confiamos en Él, Él obrará milagros a través de nosotros”.
También dijo que los misioneros aprendieron del élder Nash la importancia del Libro de Mormón como un instrumento para la obra misional y de la hermana Christofferson, cómo amar a las personas.
El élder Spencer Pratt dijo que el amor es la motivación más importante a la hora de compartir el evangelio. “Cuando oramos con toda la energía del corazón para recibir este don, tenemos la promesa de que lo recibiremos”.
Al élder Tanner Hawkes se sintió inspirado a llevar un registro de su vida y cómo el Señor lo bendice. “Cuando tengamos hijos, debemos enseñarles el evangelio y compartir [con ellos] lo que experimentamos cuando estamos cerca del Espíritu”.
El élder Alexander Shek aprendió más sobre los convenios con Dios y sobre ser una luz para los demás. “Una manera de guardar sus mandamientos es aplicar los principios del amor, compartir e invitar. Para mí, esto significa ser el amigo de alguien, compartir el gozo que recibo al vivir el evangelio e invitarlos a aprender más sobre cómo funciona”.