Casi exactamente un año después de que el presidente Russell M. Nelson se dirigiera a los jóvenes adultos Santos de los Últimos Días de todo el mundo, su primer consejero de la Primera Presidencia, el presidente Dallin H. Oaks, se dirigió a la misma audiencia e hizo eco del desafío del Profeta de “conocer la verdad y defenderla”.
En un devocional transmitido a jóvenes de 18 a 30 años de todo el mundo el domingo, 21 de mayo, el presidente Oaks y su esposa, la hermana Kristen M. Oaks, ofrecieron un amoroso consejo a los jóvenes adultos sobre el matrimonio y las citas.
La instrucción del presidente Oaks también incluyó consejos sobre cómo permanecer firmes con amor mientras se proclama la verdad, incluso sobre temas relacionados con la disforia de género y la atracción romántica hacia personas del mismo sexo.
El presidente Oaks compartió la promesa que se encuentra en 1 Nefi 10:19. “Porque el que con diligencia busca, hallará; y los misterios de Dios le serán descubiertos por el poder del Espíritu Santo”.
“Ruego para que todos los que amo, y eso incluye a todos los hijos de Dios que pueden escuchar mi voz, actúen de acuerdo con esa invitación de encontrar y conocer la verdad”, dijo el presidente Oaks.
‘El Padre Celestial tiene un plan para Sus jóvenes adultos’
El matrimonio es fundamental para el propósito de la vida mortal y lo que le sigue, señaló el presidente Oaks, y el poder de la creación es uno de los dones más preciados de la vida mortal.
“Pero el centro de ese don es la ley de castidad, el mandamiento de que nuestros poderes de procreación se expresen solo dentro del matrimonio entre un hombre y una mujer. Ese mandamiento es fundamental para el evangelio de Jesucristo. Esa realidad explica por qué tenemos valores diferentes y nos abstenemos de ciertos comportamientos que parecen comunes entre muchos a nuestro alrededor”, dijo el presidente Oaks.
Los líderes de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días están preocupados por los cambios recientes en la naturaleza y el alcance del matrimonio en los Estados Unidos. El presidente Oaks mostró dos gráficos: uno que muestra la reducción en el porcentaje de adultos en los Estados Unidos que se casan y el otro que muestra el aumento en la edad promedio de los miembros de la Iglesia que se casan.
Aquellos que intencionalmente posponen el matrimonio representan oportunidades perdidas y bendiciones pospuestas, dijo el presidente Oaks, incluyendo retrasos en el importante crecimiento personal que ocurre a través de esa relación, disminución de oportunidades para trabajar juntos en la edificación del reino de Dios y menos niños que nacen.
“Ustedes saben todo esto y ustedes necesitan saber que sus líderes saben que muchos de nuestros adultos solteros no se casan antes por razones fuera de su control”, dijo él.
“En verdad, el matrimonio es un don”, agregó la hermana Oaks. “El matrimonio no solo nos brinda la oportunidad de tener hijos, sino que también nos brinda la oportunidad y el incentivo para comenzar un viaje de crecimiento mutuo”.
En “Los Miserables” de Victor Hugo está la frase, “Amar a otra persona es ver el rostro de Dios”.
“En ninguna parte sucede eso mejor que en el matrimonio”, dijo la hermana Oaks.
El aplazamiento y la devaluación de la importancia de tener hijos es otra preocupación, continuó el presidente Oaks. Una encuesta nacional reciente mostró que la importancia de tener hijos para los adultos ha disminuido en los últimos 25 años del 66% al 33%.
“Solo recuerden, un amoroso Padre Celestial tiene un plan para Sus jóvenes adultos, y parte de ese plan es el matrimonio y los hijos”, dijo el presidente Oaks.
Un recordatorio sobre las citas
Durante muchos años, la Iglesia ha aconsejado a los jóvenes que no tengan citas antes de los 16 años. “Quizás algunos jóvenes adultos, especialmente los hombres, han llevado ese sabio consejo al exceso y han decidido no tener citas antes de los 26 años o tal vez incluso antes de los 36”, dijo el presidente Oaks.
Luego, él reiteró el consejo sobre las citas que dio en 2005. A los hombres solteros, les dijo: “Ármense de valor y busquen a alguien con quien salir. Comiencen con una variedad de citas con una variedad de mujeres jóvenes, y cuando esa fase brinde una buena perspectiva, procedan al cortejo. … Los hombres tienen la iniciativa, y ustedes los hombres deben llevarla a cabo”.
Una “cita” debe pasar la prueba de las tres p: planificada con anticipación, pagada y en pareja, explicó el presidente Oaks.
A las mujeres solteras, la hermana Oaks les dijo, “Debido a que me casé a los 53 años, sé cómo se siente la espera de un compañero digno, y el anhelo y la angustia y las lágrimas en mi almohada que a menudo la acompañaban”.
La espera de un compañero digno puede estar llena de angustia, señaló, tanto para las mujeres como para los hombres que lo desean. “La lucha es real. Salir con alguien e incluso no salir, puede ser estresante”.
A los que pasan el tiempo esperando un prospecto para casarse, “dejen de esperar y comiencen a prepararse” a través de la educación, la experiencia y la planificación, dijo ella.
“No esperen a que la felicidad les llegue. Busquen oportunidades de servicio, de aprendizaje y, lo que es más importante, confíen en el Señor, ‘invocando el nombre del Señor diariamente, y permaneciendo firmes en la fe de lo que está por venir’ (Mosíah 4:11). Les prometo que, al hacerlo, la felicidad llegará a ustedes”, dijo la hermana Oaks.
Aunque el presidente Oaks originalmente dio ese consejo sobre las citas en 2005, “los líderes de la Iglesia de Jesucristo están tan preocupados por el matrimonio ahora como lo estábamos hace 20 años”, dijo.
A los jóvenes adultos preocupados por la escasez de viviendas asequibles y el aumento de las deudas estudiantiles, el presidente Oaks los animó: “Sigan adelante con fe y hagan lo mejor que puedan con circunstancias menos favorables en el mercado inmobiliario que las que encontraron sus abuelos y yo en nuestros primeros años. Y, especialmente, trabajen para minimizar la deuda estudiantil. En el plan de Dios podemos tenerlo todo, pero no en la secuencia que el mundo parece dictar”.
Aplicar tanto el primer como el segundo mandamiento
El presidente Oaks animó a los jóvenes a establecer en sus mentes la verdad de que son hijos amados de Dios. “Su amor los dota con respeto por sí mismos, con la fuerza y la motivación para avanzar contra cualquier problema que enfrentan en su vida. Y nunca olviden que Sus siervos los aman. Los amamos”.
Una joven de 16 años llamada Amy envió recientemente al presidente Oaks una carta en la que expresa que quiere hacer lo correcto, pero se siente rodeada de valores y comportamientos que considera incorrectos y no sabe qué hacer al respecto.
En su carta, Amy escribe sobre amigos de la Iglesia que están confundidos acerca de su género, una condición llamada disforia de género. “He reflexionado sobre este tema durante algún tiempo”, dijo el presidente Oaks. “Ahora bien, en el amor que siento por aquellos que se preocupan por tales temas, me he sentido impresionado por el Espíritu de aprovechar esta oportunidad para enfatizar algunas de las preciosas verdades que el evangelio de Jesucristo revela para ayudarnos con tales confusiones”.
Cuando se le preguntó a Jesús cuál es el gran mandamiento, dio dos: primero, amar a Dios, el cual las personas muestran al guardar sus mandamientos, y segundo, amar al prójimo.
“Debemos hacer ambas cosas, y eso no es fácil”, dijo el presidente Oaks. “Muchos de nosotros tenemos la tendencia a prestar menos atención a amar a nuestro prójimo y a enfatizar demasiado el cumplimiento de la ley (mandamientos). Esa es seguramente mi tendencia debido a mi formación jurídica. … Sin embargo, también es vital para cada uno de nosotros guardar el segundo mandamiento, que es ‘semejante a él’, amar a nuestro prójimo como Jesús nos amó”.
El Salvador ofrece un ejemplo divino de guardar ambos mandamientos. En Juan 8, un grupo de fariseos y escribas traen a una mujer para ser juzgada. Su intención, explicó el presidente Oaks, era atrapar al Salvador al contradecir la ley de Moisés o la ley de Roma, que no permitía la pena capital ordenada por la ley de Moisés para el pecado de la mujer.
El Salvador desarmó efectivamente a aquellos que buscaban la aplicación inmediata de la ley al decir, “El que de entre vosotros esté sin pecado, sea el primero en arrojar la piedra contra ella” (versículo 7). El Salvador entonces aplicó el poder del amor. “Misericordiosamente se negó a condenar a la mujer, y ese acto amoroso la llevó a una nueva vida”, dijo el presidente Oaks. “La aplicación de la ley vendría después, cuando ella sería juzgada por la totalidad de su vida, incluyendo el arrepentimiento. Pero en esa ocasión anterior, el Salvador extendió el amor y la misericordia al abstenerse de condenar y luego afirmó la ley al decir ‘vete y no peques más’” (versículo 11).
La necesidad de aplicar tanto la ley como el amor, con un balance y un tiempo inspirados, está tan vigente como presente, continuó el presidente Oaks.
El élder D. Todd Christofferson, del Cuórum de los Doce Apóstoles, enseñó: “Poner el primer mandamiento en primer lugar no disminuye nuestra capacidad de guardar el segundo mandamiento. Al contrario, la amplifica y fortalece. … Nuestro amor por Dios eleva nuestra capacidad de amar a los demás de manera más plena y perfecta porque, en esencia, nos asociamos con Dios en el cuidado de Sus hijos” (“El primer mandamiento es lo primero”, devocional de BYU, 22 de marzo de 2022).
En un discurso anterior, el presidente Oaks se refirió a “tratar continuamente de balancear los mandamientos duales del amor y la ley” (“La paradoja del amor y la ley”, devocional de BYU-Idaho, 30 de octubre de 2018). “Pero ahora creo que ese objetivo se expresa mejor tratando de vivir estos dos mandamientos de una manera más completa. Cualquiera que no trate a las personas que enfrentan desafíos de identidad de género con amor y dignidad no está alineado con las enseñanzas del primer y segundo gran mandamiento. Por lo tanto, sobre el tema de la ley de Dios, debemos recordar que Dios ha revelado una y otra vez que Él creó al hombre y a la mujer. Y sobre el tema de nuestro deber de amar a nuestro prójimo, debemos recordar que Dios nos ha mandado amar incluso a aquellos que no guardan todos los mandamientos”.
A las personas y a sus familiares o amigos que puedan estar luchando con problemas de confusión de identidad, el presidente Oaks dijo: “Los insto a aplicar tanto la ley del Evangelio como el amor y la misericordia de nuestro Salvador y Redentor, quien los ayudará y guiará, si caminan con paciencia por Sus sendas. Jesucristo, quien dijo que Él era la “luz del mundo”, nos enseña el camino que debemos seguir para hacer realidad las bendiciones más selectas de nuestro Padre Celestial. Él nos a través de las Escrituras, a través de Sus profetas y por medio de la revelación personal. Él nos ama y nos guiará mientras busquemos seguirlo a donde Él nos conduzca”.
A los que experimentan el sentimiento de sentirse atraídos románticamente por personas del mismo sexo, el presidente Oaks señaló que, si no se actúa en base a ellas, tales atracciones no son pecados. “Pero, ¿cómo lidiamos con tales sentimientos, en nosotros o en los demás?” preguntó. “Mi primer consejo es recordar que, cualesquiera que sean nuestras propias variaciones en la diversidad de las creaciones de nuestro Padre Celestial, Él nos ama a todos y Su perfecto plan de felicidad tiene un lugar para todos. Mostramos nuestro amor por Él guardando Sus mandamientos, incluyendo el amor por Sus hijos”.
El presidente Oaks también hizo eco del consejo del presidente Nelson de tener cuidado con las etiquetas. “Ningún identificador debe desplazar, reemplazar o tener prioridad sobre estas tres designaciones perdurables: ‘hijo de Dios’, ‘hijo del convenio’ y ‘discípulo de Jesucristo’”.
El presidente Nelson también advirtió: “Cualquier identificador que no sea compatible con estas tres designaciones básicas acabará defraudándolos. Otras etiquetas los decepcionarán con el tiempo porque no tienen el poder de conducirlos hacia la vida eterna en el reino celestial de Dios” (“Opciones para la eternidad”, Devocional mundial para jóvenes adultos, 15 de mayo de 2022).
¿Qué es lo que sí tiene el poder de conducir a las personas a la vida eterna en el reino celestial? Los convenios hechos con Dios (“El convenio sempiterno”, 6 de octubre de 2022, Liahona).
En conclusión, la hermana Oaks compartió la historia de los hijos de Israel que fueron atacados por serpientes venenosas en el desierto. Por mandato de Dios, Moisés crea un bastón, que simboliza al Salvador, Jesucristo, al que el pueblo debe acudir en busca de sanidad. “Esta noche, al igual que los israelitas, estamos siendo atacados por diversas creencias que consideramos sagradas. Les pido también a ustedes que miren a Dios y vivan. Fíjense en las palabras pronunciadas esta noche, las palabras de nuestro Profeta, las Escrituras, el plan de salvación y sus bendiciones patriarcales. Oren y el Señor estará con ustedes”.
El presidente Oaks reiteró las preocupaciones amorosas compartidas durante el devocional, incluyendo la función y el momento oportuno para el matrimonio y los hijos, la necesidad de procurar diligentemente conocer a Jesucristo y sentir Su amor, y la necesidad de observar los dos grandes mandamientos.
“En todas nuestras preocupaciones, mientras superamos todos nuestros desafíos, les instamos a tener buen ánimo, porque Él ha vencido al mundo. Nosotros también podemos. Recuerden, el plan de nuestro Padre es un plan de felicidad”, dijo el presidente Oaks.
En una publicación de Facebook, el élder y la hermana Oaks animaron a los jóvenes adultos a reunirse con amigos para ver el devocional.
Los Santos de los Últimos Días de otras partes del mundo pueden ver el devocional en broadcast.ChurchofJesusChrist.org o transmitirlo en la Biblioteca del Evangelio o en el canal de YouTube de la Iglesia. También será retransmitido la tarde y noche del 28 de mayo.
Cómo verlo
- En el sistema satelital de la Iglesia.
- En broadcasts.ChurchofJesusChrist.org (disponible durante dos semanas).
- En YouTube, a través de transmisión en vivo y bajo demanda en 10 idiomas: inglés, español, portugués, francés, italiano, alemán, ruso, japonés, coreano y chino.
Además, los archivos de video estarán disponibles en todos los idiomas de transmisión en la Biblioteca del Evangelio en “Jóvenes Adultos” poco después de la transmisión.
