La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días está otorgando una suma de USD$44 millones a varias organizaciones que trabajan en todo el mundo para aumentar la nutrición infantil.
“Proporcionar alivio vital para las madres y los niños vulnerables es una parte importante de la obra del Salvador”, dijo el obispo presidente de la Iglesia, Gérald Caussé. “Estamos agradecidos de colaborar con tantos otros que ayudan a aliviar el hambre y la pobreza. Que Dios los bendiga a ellos y a otros cuyas generosas contribuciones hacen que esto sea posible”.
Los proyectos, que se llevarán a cabo en 30 países, promoverán e incorporarán principios de autosuficiencia y participarán en soluciones basadas en evidencia para combatir las crecientes tasas de desnutrición antes de los 5 años, explicó un comunicado de prensa sobre la donación de ChurchofJesusChrist.org.
Los fondos se destinarán a CARE, Catholic Relief Services, Helen Keller International, The Hunger Project (los tres en inglés) y varias otras organizaciones.
Más de 3 millones de niños (en inglés) morirán este año por desnutrición, informó la Iglesia. Y la mitad de todos los niños en todo el mundo sufren deficiencias de vitaminas y minerales esenciales.
La presidenta general de la Sociedad de Socorro, Camille N. Johnson, dijo: “Ningún esfuerzo humanitario es más fundamental para la Iglesia de Cristo que alimentar a los hambrientos. Estamos agradecidos de tener los medios para colaborar con organizaciones maravillosas y brindar ayuda a niños y madres jóvenes en extrema necesidad. Mientras servimos juntos, extendemos el alcance de los brazos amorosos de Cristo”.
En 2022, los esfuerzos de la Iglesia para atender a los necesitados incluyeron más de mil millones de dólares en gastos y 3692 proyectos humanitarios en 190 países y territorios.
Otra ayuda de nutrición infantil incluyó una donación de USD$32 millones al Programa Mundial de Alimentos y USD$5 millones a la iniciativa No Time to Waste [Sin tiempo que perder] de UNICEF.
Blaine R. Maxfield, director gerente de los Servicios de Bienestar y Autosuficiencia de la Iglesia, dijo que los crecientes niveles de desnutrición infantil son una prioridad clave para la Iglesia.
“Nuestra colaboración con estas organizaciones ayuda a brindar alivio a niños y madres vulnerables en todo el mundo. Estos esfuerzos conjuntos bendecirán a casi 2 millones de vidas en 30 países. Esta respuesta demuestra nuestro compromiso con los dos grandes mandamientos. Mostramos nuestro amor a Dios al tender la mano para cuidar a Sus hijos, sin importar su ubicación o antecedentes”.
CARE
Con los nuevos fondos, CARE fortalecerá las iniciativas de autosuficiencia que ayudan a las mujeres a criar pollos, cabras y abejas; cultivar huertos y mejorar la alimentación de sus hijos. CARE significa: Cooperativa de Asistencia y Socorro en Todas Partes (por sus siglas en inglés).
“Estamos inmensamente agradecidos”, dijo la presidenta y directora ejecutiva de CARE USA, Michelle Nunn, en el comunicado de prensa. “La financiación de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días nos permite ampliar nuestro trabajo en países como Etiopía y Ghana y mejorar el bienestar de miles de niños más y sus familias afectadas por la inseguridad alimentaria y la desnutrición”.
Catholic Relief Services
Catholic Relief Services utilizará los fondos para mejorar el estado nutricional (en inglés) de unas 165 000 niñas adolescentes, madres jóvenes y sus hijos menores de 2 años en países como Guatemala, Liberia, Ruanda, Tanzania, Timor-Leste y Zambia.
“Esto va a ser transformador para miles de adolescentes y mujeres jóvenes”, dijo Sean Callahan, presidente y director ejecutivo de Catholic Relief Services. “Ayudará a Catholic Relief Services a poner fin al ciclo de desnutrición”.
Helen Keller Intl
La financiación apoyará los esfuerzos de Helen Keller Intl para ayudar a las mujeres a tener embarazos saludables y a los bebés a tener un comienzo de vida nutritivo (en inglés) en Camboya, Kenia, Malí, Nigeria y Senegal.
“En todo el mundo, las madres y los niños luchan más que nunca para mantener una alimentación adecuada”, dijo Shawn Baker, director de programas. Expresó su gratitud por “la generosidad continua de colaboradores como La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días a medida que construimos un acceso sostenido a una buena nutrición para las familias y las comunidades durante este momento crítico”.
The Hunger Project
The Hunger Project ayudará a las madres y los niños a recibir una nutrición sostenible y creará talleres comunitarios para enseñar las mejores prácticas de agua potable, el saneamiento y la higiene. Esta labor se llevará a cabo en lugares desde México hasta Zambia.
El director general de The Hunger Project, Tim Prewitt, dijo que cuando visita comunidades rurales como parte de su trabajo, una cosa está clara: saben que una vida sin hambre es posible.
“Debemos recordar que el hambre es un ciclo, una injusticia que se transmite de madre a hijo y que se perpetúa mediante sistemas de inequidad. También se puede invertir. Colaboraciones como nuestro trabajo con La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días son fundamentales para apoyar a las comunidades a medida que rompen ese ciclo”.
Este proyecto está financiado en parte por LDS Charities Australia.