La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días donó nuevas instalaciones y programas educativos en dos pueblos remotos de la región del Volta, Ghana, para ayudar a los estudiantes a superar sus dificultades de aprendizaje.
El 21 de marzo (en inglés), estudiantes, maestros y funcionarios educativos de este país de África Occidental celebraron la donación con bailes y discursos.
Posteriormente, el 24 de abril (en inglés), la Iglesia donó equipo a seis centros médicos en la Región Oriental de Ghana para complementar la capacitación que ofrece la Iglesia en atención materna y neonatal.
Estas iniciativas forman parte de la iniciativa mundial de la Iglesia para mujeres y niños, liderada por la Sociedad de Socorro. Esta iniciativa busca el mayor impacto posible destinando fondos a iniciativas que benefician especialmente la vida de mujeres y niños menores de 5 años, a través de las áreas de atención materna y neonatal, nutrición infantil, vacunación y educación en todo el mundo.
Para las donaciones educativas, la Iglesia colaboró con Right To Play, una organización no gubernamental mundial.
En sus palabras a la audiencia en la ceremonia oficial, el élder Samuel Annan-Simons, Setenta de Área, citó al presidente de la Iglesia, Russell M. Nelson: “En la Iglesia, el obtener una educación y adquirir conocimiento es una responsabilidad religiosa. Educamos nuestras mentes para que un día podamos rendir servicio valioso a otra persona.” (“Concéntrense en los valores”, febrero de 2013, revista Liahona).
El élder Annan-Simons concluyó: “Queremos que sepan que los amamos, y este es nuestro esfuerzo por vivir las enseñanzas de Jesucristo, que es amar a Dios y amar a nuestro prójimo”.
Para el proyecto que involucra a los seis centros médicos con los Servicios de Salud de Ghana, la Iglesia financió a Jhpiego, una organización sin fines de lucro dedicada a la salud internacional, con presencia en el país, según informó la Sala de Prensa de la Iglesia en África (ambos en inglés). Las donaciones incluyeron escáneres Doppler portátiles para controlar los latidos del corazón de los bebés en el útero, ecógrafos, estetoscopios, reanimadores con bolsa y mascarilla, y tanques de oxígeno.
Representantes de la Iglesia supervisaron la capacitación, entre ellos el élder Michael Visick, pediatra y misionero mayor de Servicios Humanitarios.
En el evento de entrega, el élder Visick habló sobre las ofrendas que los miembros de la Iglesia hacen en todo el mundo para cuidar a sus hermanos y hermanas necesitados.
“Este desarrollo de capacidades y este equipo no provienen de un gobierno con una agenda específica. Les llega de los miembros de la Iglesia: madres y padres, que se han sacrificado porque sienten que nuestro Dios no quiere que las madres mueran ni que los bebés mueran. Queremos que sepan que estos miembros se preocupan por ustedes en Ghana”, dijo el élder Visick.
El presidente Kenneth S. Okonkwo, segundo consejero de la presidencia de la Estaca Koforidua, Ghana, dijo a la audiencia que la donación de equipo es un símbolo de los valores fundamentales de la Iglesia: el amor y la importancia de la vida.
“Creemos que el valor del alma, o el valor de la vida, es muy importante para nuestro Padre Celestial”, dijo.
Donaciones a una prisión y centro de atención en Ghana
Otras donaciones en Ghana también buscaron mejorar la vida de los necesitados.
El 4 de marzo, la Iglesia donó un incinerador de residuos sólidos al Hospital Universitario Ho, en la región del Volta, para ayudar al hospital a satisfacer las crecientes necesidades de la comunidad.
Posteriormente, el 17 de marzo, la Iglesia donó equipos informáticos, máquinas de coser, telares y otros materiales a la Prisión Central de Wa, en la región del Alto Oeste de Ghana. Esto permitirá a los reclusos adquirir habilidades para ganarse la vida tras su liberación, informó la Sala de Prensa de la Iglesia en Africa.
El 4 de abril, el Servicio Nacional de Ambulancias de Ghana recibió con agrado la donación de un centro de atención de emergencias renovado y remodelado gracias a la financiación de la Iglesia y a la labor de The Hunger Project.
A principios de marzo, la Iglesia donó ambulancias especiales (los anteriores en inglés) para ayudar a miles de personas en 10 distritos de Ghana. Las ambulancias motorizadas con triciclo modificadas son mini ambulancias todoterreno que pueden llegar a comunidades a las que las ambulancias tradicionales no pueden llegar.
El presidente Desmond O. Anom, presidente de la Estaca Koforidua, Ghana, citó Santiago 2:8 al decir: “‘Si en verdad cumplís vosotros la ley real, conforme a la Escritura: Amarás a tu prójimo como a ti mismo, bien hacéis’. Así que hoy estamos aquí para cumplir la ley que todo cristiano debe cumplir para ayudar a los hijos de Dios. Esto es lo que representa la Iglesia: ayudar a nuestro prójimo. Ayudar al servicio de ambulancias no es ayudar a la empresa, sino a las personas”.
