El Programa Mundial de Alimentos (PMA) de las Naciones Unidas anunció que ha recibido una donación de USD$8 millones de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días para el programa de comidas escolares con productos locales del PMA en Haití.
La iniciativa, una colaboración entre la Iglesia, el PMA y el Programa Mundial de Alimentos de EE. UU., proporcionará nutrición crítica a los niños en áreas vulnerables, explicaron los comunicados de prensa del Programa Mundial de Alimentos de EE. UU. y la Iglesia (ambos en inglés).
“Como seguidores de Jesucristo, nos esforzamos por cuidar a los necesitados como Él lo haría”, dijo Blaine R. Maxfield, director gerente de los Servicios de Bienestar y Autosuficiencia de la Iglesia. “Estos esfuerzos en Haití ayudarán a garantizar que los niños tengan acceso a la nutrición que necesitan para centrarse en su educación, al mismo tiempo que fortalecen las comunidades al obtener comidas a nivel local”.
La mitad de la población de Haití tiene dificultades para encontrar lo suficiente para comer, informó el PMA, lo que convierte a la nación caribeña en una de las que presenta una mayor proporción de inseguridad alimentaria aguda en todo el mundo.
El comunicado de prensa indica que en el próximo año escolar 2024-2025, el PMA tiene previsto proporcionar comidas escolares a casi 500 000 estudiantes, el 70% de las cuales se prepararán íntegramente con ingredientes cultivados en Haití comprados a agricultores locales.
Estas comidas escolares de cosecha propia proporcionarán nutrición a los niños, lo que les permitirá permanecer en la escuela, al mismo tiempo que apoyarán a los pequeños agricultores locales, fortaleciendo así las economías locales y promoviendo la sostenibilidad del programa.
Barron Segar, presidente y director ejecutivo del Programa Mundial de Alimentos de EE. UU., dijo que esta contribución se basa en más de una década (en inglés) de trabajo con la Iglesia.
“La Iglesia sigue sirviendo como colaboradora esencial, apoyando las operaciones globales del PMA durante las emergencias, al mismo tiempo que intensifica el trabajo para desarrollar la resiliencia de la comunidad”, dijo Segar. “Además de apoyar el trabajo sobre el terreno en Haití, estamos agradecidos por la generosidad de la Iglesia al ayudarnos a servir a miles de personas en otros países del mundo este año, mientras combatimos la crisis mundial del hambre”.
Las organizaciones celebraron una década de colaboración anunciando una contribución de USD$2 millones de la Iglesia para ayudar a financiar un centro de respuesta a emergencias en el Caribe.
En lo que va de año, la Iglesia ha apoyado al PMA brindando asistencia alimentaria en varios países, según el comunicado de prensa. Esto incluyó la entrega de alimentos de emergencia en Ucrania y Nigeria, la alimentación de escolares y la promoción de una nutrición adecuada para madres y bebés (en inglés) en Chad, Ecuador, Cuba, Guinea, Honduras y Perú.
Y la Iglesia donó USD$32 millones al Programa Mundial de Alimentos para ayudar a proporcionar alimentos y asistencia crítica a 1.6 millones de personas en nueve países en septiembre de 2022. Además, el PMA ha utilizado fondos de la Iglesia para proporcionar alimentos y otra asistencia crítica para brindar ayuda humanitaria a las personas más vulnerables del mundo, incluyendo madres y niños pequeños, en 46 países.