WASHINGTON, D.C. — El día era caluroso y húmedo, pero eso no impidió que Frances Seay saludara con entusiasmo a todos los visitantes en el puesto de FamilySearch.
“Nadie dice ‘no’ si te detienes y hablas con ellos [sobre su familia]”, dijo. “Así es como comparto el Evangelio, porque la gente no quiere estar separada de su familia”.
Seay, quien es la directora del Centro FamilySearch de Washington, D.C. (en inglés), participó de cerca en la planificación del puesto de FamilySearch durante el Festival Smithsonian Folklife (en inglés) que se llevó a cabo del 29 de junio al 4 de julio y del 6 al 9 de julio.
El Folklife Festival es el evento cultural anual más grande de la capital de los EE. UU., según el sitio web (en inglés) del festival. Comenzó en 1967 y explora patrimonios culturales vivos cada verano.
Por lo general, se divide en programas que presentan una nación, región, estado o tema e incluye música, arte, baile, cocina, artesanía y más. Los programas de este año son “Los Ozarks: Rostros y facetas de una región” y “Encuentros creativos: Religiones activas en EE.UU.”.
Seay dijo que el festival recibe hasta medio millón de visitantes cada año y nunca presenta el mismo programa dos veces. Entonces, cuando los líderes del Smithsonian invitaron a FamilySearch a participar en el programa de este año, “Religiones activas en los E.E. U.U.”, supo que era una oportunidad única e importante.
Ahora, más de 160 lugareños se ofrecen como voluntarios en el puesto de FamilySearch durante el festival, ayudando a los visitantes a descubrir quiénes son y de dónde vienen.
“Esta experiencia al aire libre es como un centro de visitantes”, dijo Seay. “Tenemos gente que quiere saber sobre religión. ... Mi esperanza es que todos puedan captar ese sentimiento de alegría que proviene de compartir el Evangelio”.
Un sentimiento de pertenencia
Cuando los visitantes llegan al puesto de FamilySearch, pueden sentarse frente a una computadora y comenzar a usar el sitio web de FamilySearch para completar lo que ya saben sobre sus antepasados. Los voluntarios están disponibles para brindar ayuda y responder preguntas.
El puesto de FamilySearch también tiene una serie de elementos interactivos, dijo Seay, como una sección para niños con páginas para colorear y tableros de juego con agujeros ‘cornhole’ y un “árbol genealógico” donde las personas pueden trazar una serie de rasgos (país de origen, color de ojos, tipo de cabello) con largos tramos de hilo de colores.
Seay dijo que le encanta ver a las personas conectarse entre sí y con sus antepasados mientras exploran su historia familiar.
Su pasión por la historia familiar creció a partir de la muerte de su hijo de 3 años hace muchos años. Seay dijo que encontró consuelo al saber dónde estaba él y qué estaba haciendo, pero se dio cuenta de que “hay tantos bebés desaparecidos” a lo largo de las historias familiares personales, tanto por la falta de registros como por la falta de conocimiento sobre lo que sucede después de esta vida.
“[La historia familiar] te da un sentido de pertenencia donde nadie realmente pertenece”, dijo. “... Me encanta saber que pertenezco y quiero que todos los demás lo sepan”.
‘Un gran comienzo’
Seay no es la única que ve las bendiciones de hacer historia familiar. El élder Eric Baxter, un Setenta de Área local, y su esposa, la hermana SaraLyn Baxter, se ofrecieron como voluntarios con tres de sus hijas en el puesto de FamilySearch el 3 de julio.
El élder Baxter dijo que cuando las personas conocen a sus familias, comprenden mejor su propósito y potencial.
“Queremos compartir eso con todos. Hay mucho gozo en compartir la historia familiar”, dijo.
Él agregó que espera que las personas se vayan del puesto de FamilySearch sabiendo que son importantes para Dios y para sus familias.
El National Mall celebra una variedad de conceptos importantes para la cultura estadounidense, dijo el élder Baxter, desde la ciencia hasta el arte; “Así que estamos muy agradecidos con el Smithsonian por reconocer que la religión es importante para nuestra [forma de] vida estadounidense”.
Lonnie Bunch, secretario del Smithsonian, dijo que el Festival Folklife es una invitación a aprender sobre historia y cultura de maneras en las que la gente normalmente no piensa.
“Esta es una manera de que todos entiendan que la mayor fortaleza de la nación es su diversa cultura”, dijo.
Bunch fue anteriormente el director fundador del museo Smithsonian Museo Nacional Afroamericano de Historia y Cultura. En 2016, FamilySearch le dio al museo una base de datos indexada de los históricos Freedmen’s Bureau Records (en inglés), que contiene información genealógica de los afroamericanos liberados después de la Guerra Civil.
“Entonces, es realmente ese tipo de cosas que dicen: ‘La historia es demasiado importante para estar sólo en las manos de los historiadores’”, dijo Bunch sobre esa experiencia.
Richard Ruvelson, un visitante del Festival Folklife que se detuvo en el puesto de FamilySearch, dijo que los voluntarios lo ayudaron a profundizar en su propia historia. Por ejemplo, se enteró de que tiene algunas tías y tíos abuelos más de los que ya conocía.
También dijo que el cáncer de ovario se presenta entre las mujeres de su familia, y el explorar su historial familiar crea una imagen más clara de cómo se ha propagado la enfermedad y puede continuar propagándose a lo largo de las generaciones.
“Creo que [FamilySearch] es absolutamente un gran comienzo y [está] llevándome en direcciones que no había anticipado”, dijo Ruvelson.