AUCKLAND, Nueva Zelanda — Luego de tres años de interrupciones relacionadas con la pandemia, el Centro de Capacitación Misional de Nueva Zelanda, uno de los CCM con más antigüedad de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, espera tener su primer año completo de capacitación presencial desde 2019.
Un resumen rápido de las operaciones intermitentes del CCM de Nueva Zelanda, gracias a los cierres y precauciones por la pandemia de COVID-19 en el área:
- El CCM de Nueva Zelanda se unió a todos los entonces 10 centros de capacitación misional de la Iglesia en todo el mundo para cerrar las operaciones presenciales a finales de marzo de 2020. Al igual que otros CCM, continuó con la capacitación en línea cuando cerró.
- Reabrió sus puertas a nuevos misioneros para la capacitación presencial a finales de junio de 2021.
- Esa reanudación de la capacitación duró solo dos generaciones de nuevos misioneros antes de cerrar nuevamente debido a las renovadas restricciones de la pandemia en el Pacífico Sur.
- Más de un año después, el CCM de Nueva Zelanda reabrió nuevamente a finales de septiembre de 2022 para recibir a un número limitado de misioneros en capacitación — y ha permanecido en funcionamiento desde entonces.
El presidente del CCM de Nueva Zelanda, Lindsay T. Dil, y la hermana Christina Dil originalmente comenzaron una asignación de dos años en enero de 2019 y ahora han mantenido el liderazgo durante el doble de ese periodo. El presidente Charles A. Rudd y la hermana Annette L. Rudd, llamados originalmente para comenzar su servicio en 2021 (en inglés), no pudieron obtener la visa necesaria ni las asignaciones de viaje hasta hace poco.
Todo eso cambió este mes, ya que los Rudd — expresidente y su compañera de la Misión Nueva Zelanda Hamilton — completaron su nueva capacitación de liderazgo del CCM en Utah antes de viajar a Auckland para asumir el liderazgo eclesiástico en el CCM de Nueva Zelanda.
Un CCM más pequeño y personal
Los misioneros asignados a servir en Australia, Fiyi, Nueva Zelanda, Papúa Nueva Guinea, Samoa, Tahití, Tonga y otros lugares del Pacífico Sur se capacitan en el CCM de Nueva Zelanda en cinco idiomas ofrecidos — inglés, inglés como segundo idioma, francés, samoano y tongano, los tres últimos solo para hablantes nativos.
El CCM tiene una capacidad para poco más de 100 misioneros — el equivalente a dos o tres ramas de misioneros en el Centro de Capacitación Misional de Provo, mucho más grande, en Utah. En Auckland, no hay grandes devocionales con una asistencia de cuatro dígitos.
“Sí, nunca nos sentamos en un estadio o auditorio”, dijo el presidente Dil, y agregó que cuando las autoridades generales vienen de visita o en los devocionales, “los misioneros tienen encuentros muy personales, cercanos y grandiosos”.
Dijo la hermana Dil de los misioneros que interactuaban con los líderes visitantes — “Puedes verlo en sus rostros, es mágico”.
Liderazgo eclesiástico
Un presidente del CCM y su compañera sirven como líderes eclesiásticos para los misioneros en capacitación; en este caso, el presidente Dil como presidente del CCM y la hermana Dil como presidenta de la Sociedad de Socorro del CCM.
“Vivimos con ellos, somos sus líderes”, dijo la hermana Dil, “pero somos como padres que solo se aseguran de que estén cómodos, felices, saludables — y luego llegan maestros profesionales y les enseñan”.
El presidente Dil dijo que los líderes del CCM sirven como un filtro — “Toman a los misioneros tal como son cuando llegan y, con suerte, en tres semanas saldrán de aquí luciendo como misioneros, pensando como misioneros, actuando como misioneros y listos para enseñar como misioneros”.
Ambos agregan que es una transición para los misioneros pasar de ser un joven adulto soltero Santo de los Últimos Días a convertirse en un discípulo y representante de Jesucristo.
El apartamento de los líderes está justo ahí en el CCM, justo del otro lado de la puerta. “Somos médicos”, dijo el presidente Dil, “somos la seguridad, somos el transporte, somos los suministros, somos todo lo que necesitan”.
Cierre y cuarentena
Ese apartamento entró en juego durante el cierre inicial de la pandemia en marzo de 2020, cuando el CCM de Nueva Zelanda se apresuraba a enviar misioneros de regreso a Samoa y Tonga y a otros lugares antes de que las naciones insulares cerraran sus fronteras por precauciones de salud.
“El avión aterrizó en Samoa con los misioneros a bordo”, dijo el presidente Dil, “y una hora más tarde, sus fronteras se cerraron — y han estado cerradas durante los últimos tres años”.
Al igual que los misioneros de tiempo completo fueron puestos en cuarentena en sus residencias durante los primeros meses de la pandemia de COVID-19, los Dil se vieron restringidos a su pequeña residencia en el CCM desde finales de marzo hasta noviembre, cuando Auckland y el resto de Nueva Zelanda impuso limitaciones de cierre y detuvieron el movimiento regular en las ciudades y las comunidades.
Gestión de operaciones
Los líderes eclesiásticos como los Dils, los Rudd y otros en todo el mundo trabajan en conjunto con el gerente local de operaciones en cada centro de capacitación. En Nueva Zelanda, esa es Timena Gasu, gerente de capacitación y operaciones del CCM.
Gasu tiene una larga historia con el CCM de Nueva Zelanda, que se remonta a 1977 y su ubicación original en Hamilton como parte del antiguo complejo del Church College. Llegó como nueva misionera en capacitación en 1995, asignada a la Misión Nueva Zelanda Auckland, y luego comenzó a enseñar en el CCM en 2001 durante algún tiempo antes del nacimiento de su hijo en 2004.
Regresó en 2007 cuando el CCM necesitaba un maestro samoano, luego asumió el rol de supervisora en 2009 justo cuando el CCM estaba comenzando la transición para su reubicación en septiembre de 2010 en Auckland y ha sido la única gerente de operaciones en Auckland.
Después de haber visto muchos cambios — desde las instalaciones físicas hasta el plan de estudios de capacitación — a lo largo de los años, Gasu agradece el énfasis basado en principios y normas de la capacitación misional en lugar de simplemente establecer y hacer cumplir las reglas para crear una expectativa de obediencia.
“Veo que es importante enseñarles grandes principios y doctrina y dejar que se gobiernen a sí mismos”, dijo, y también subrayó cómo “Predicad Mi Evangelio” y los ajustes continuos del plan de estudios ayudan a los misioneros a aprender y enseñar con el Espíritu. “Lo disfrutan más, porque no están obligados a memorizar”.
Los misioneros de Norteamérica y Sudamérica asignados para capacitarse en Nueva Zelanda “elevan la curva de aprendizaje para los misioneros polinesios del Pacífico Sur”, dijo Gasu. “Tener a los misioneros estadounidenses les ayuda a vivir de manera obediente, a ver el ejemplo del estudio, a ser animados y dejarse guiar. Esa es la positividad de que vengan”.
Por el contrario, los misioneros estadounidenses pueden aprender rasgos como la humildad, el trabajo duro y una fe profunda de sus homólogos polinesios.
Su papel de operaciones requiere equilibrar una variedad de tareas, desde capacitar a los maestros hasta interactuar con los misioneros en los talleres y supervisar todo lo contratado, incluida la cocina, la limpieza y el mantenimiento. Y aún continúan algunos desafíos posteriores a la pandemia relacionados con visas, restricciones de viaje y demás.
Un nuevo vecino
Durante años, el CCM y el centro de reuniones adyacente se alzaron majestuosamente en campos abiertos con vistas a la carretera estatal 1 de Nueva Zelanda y bajo los patrones de vuelo de los aviones que llegaban y salían del aeropuerto de Auckland, a solo 15 minutos en auto hacia el oeste.
Pero durante los últimos dos años y medio, los terrenos han cedido a la construcción del nuevo Templo de Auckland, Nueva Zelanda, justo afuera de la puerta principal del CCM, luego de la palada inicial del templo el 13 de junio de 2020 (en inglés).
El presidente Russell M. Nelson anunció un templo para Auckland durante la conferencia general de octubre de 2018 (en inglés) y luego identificó públicamente su ubicación en Redoubt Road de la ciudad de Manukau mientras visitaba Auckland durante su ministerio en el Pacífico (en inglés) en mayo de 2019.
“Tener el CCM a la sombra del templo será magnífico e inspirador”, dijo el presidente Dil, ya que en el pasado los misioneros en capacitación tenían que viajar unos 105 kilómetros en autobús para asistir al Templo de Hamilton, Nueva Zelanda. “Los misioneros podrán caminar para ir al templo el día de la preparación”.
Será un uso diferente al capacitar a los misioneros. “Era una propiedad grande y agradable — solían jugar al rugby en lo que ahora es el sitio del templo”, dijo la hermana Dil, y agregó con una sonrisa. “Se han divertido en terreno sagrado”.
En realidad, el templo de Hamilton estuvo cerrado por renovaciones desde julio de 2018 hasta su rededicación en octubre de 2022, por lo que los líderes y misioneros del CCM dieron la bienvenida al acceso devuelto al templo allí hasta que el templo de Auckland esté terminado y dedicado.
Debido al tiempo y la distancia para viajar a Hamilton, los misioneros en capacitación a menudo iban al templo solo una vez durante su estancia en el CCM de Nueva Zelanda. Una vez que el templo vecino esté dedicado y en funcionamiento, los misioneros podrán asistir al menos una vez a la semana — una buena oportunidad para los misioneros de áreas del Pacífico Sur donde tal vez solo hayan tenido una experiencia en el templo — su propia sesión de investidura — antes de comenzar su misión, dijo el presidente Dil.
Lo que los misioneros dicen
Los misioneros que fueron de los primeros en reanudar la capacitación presencial en el CCM de Nueva Zelanda a finales del año pasado dijeron lo siguiente sobre sus experiencias:
¿Cuáles eran sus expectativas? — “Recibí la asignación aquí unas semanas antes de irme. Esperaba ir a Provo, así que fue una buena sorpresa porque siempre quise venir a Nueva Zelanda. Esperaba ver la hermosa área aquí y el CCM, y ansiaba aprender más sobre cómo enseñar de manera sencilla”. — Hermana Brianne Bartschi, Stevensville, Montana, asignada a la Misión Australia Perth.
¿Qué ideas preconcebidas tenía sobre la capacitación en un CCM más pequeño? — “He recorrido el CCM de Provo antes. Cuando llegué aquí y le eché un vistazo y vi lo pequeño que era, dije: ‘Oh, está bien’. … Pero como es tan pequeño, conocemos a todos aquí, nos hemos unido como una familia, y es realmente muy unido”. — Élder Joshua Haworth, Rexburg, Idaho, asignado a la Misión Australia Adelaida
¿Qué le ayuda a sentir el Espíritu en el CCM de Nueva Zelanda? — “Cuando me olvido y me pongo manos a la obra, cuando recuerdo que estoy aprendiendo para las personas a las que voy a servir. No se trata solo de mí, se trata de ellos, y se trata de mi Salvador”. — Élder Isaac Masima, Sydney Australia, asignado a la Misión Australia Perth
¿Qué le ha dicho a familiares y amigos? — “Les he dicho que es muy pequeño, pero eso lo hace aún mejor, porque aquí todos estamos súper cerca. He llegado a conocer a todas las personas aquí, y todos tienen testimonios muy sólidos, y eso también me ha ayudado a construir mi propio testimonio aquí”. — Hermana Olivia Tonas, Sacramento, California, asignada a la Misión Australia Perth
¿Qué ha ayudado a que crezca su testimonio en el CCM de Nueva Zelanda? — “Los otros misioneros me han ayudado mucho a fortalecer mi testimonio, al igual que los maestros, simplemente haciendo que la capacitación sea realista y siendo honestos. Ayuda mucho”. — Élder Toli Toilalo, Sídney, Australia, asignado a la Misión Australia Perth
¿Qué significa ser un misionero en capacitación y salir y ver la construcción del templo de al lado? — “Gozo. Solo siento gozo. Y a medida que aprendo más sobre el evangelio de Jesucristo, aquí y en el templo, puedo ayudar a otras personas a entender lo que significa también”. — Élder Samuel Arnott, Sídney, Australia, asignado a la Misión Australia Adelaida
Un vistazo
Centro de Capacitación Misional de Nueva Zelanda
Dirección: 19 Redoubt Road, Goodwood Heights, Ciudad de Manukau, Nueva Zelanda
Inaugurado: En 1977 en Hamilton, Nueva Zelanda
Reubicado: En septiembre de 2010 en la Ciudad de Manukau, un suburbio de Auckland, Nueva Zelanda
Capacidad actual: 106 misioneros
Capacitación: Para misioneros que prestan servicio en Australia, Fiyi, Nueva Zelanda, Papúa Nueva Guinea, Samoa, Tahití, Tonga y otros lugares del Pacífico Sur
Idiomas de capacitación: inglés, inglés como segundo idioma, francés, samoano y tongano — los últimos tres solo para hablantes nativos
