Con lágrimas en los ojos, el élder Ulisses Soares, del Cuórum de los Doce Apóstoles, dijo a una reunión de miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en Cuba cuán deseoso había estado de visitarlos.
“No pude sino recordar mis primeras reuniones de la Iglesia en Brasil con cuatro o cinco familias en un local pequeño rentado en el segundo nivel de una panadería. Allí fue donde aprendí las primeras lecciones del evangelio. Un lugar muy sencillo donde se reunía gente como ustedes, quizás 4 o 5 familias, pero fue para mí un tiempo de formación para obtener mi testimonio de Jesucristo y ver la Iglesia crecer”, dijo el élder Soares en una conferencia de distrito el 13 de noviembre en Vedado.
De igual forma, resaltó el carácter pionero de los primeros miembros de la Iglesia en Cuba y cómo la obra descansaría sobre la base de su servicio durante estos años.
“Mis queridos hermanos y hermanas sean de buen ánimo, a pesar de las dificultades que tengan que enfrentar, pues el Señor ha dicho: ‘Sed de buen ánimo, pues, y no temáis, porque yo el Señor, estoy con vosotros y os ampararé; y testificareis de mí, si Jesucristo, que soy el Hijo del Dios viviente; que fui, que soy y que he de venir’” (Doctrina y Convenios 68:6), dijo el élder Soares.
A la conferencia asistieron unas 220 personas. Algunas personas viajaron hasta 12 horas desde el lado este de la isla para la conferencia de distrito, informó la Sala de Prensa de la Iglesia en el Caribe.
Durante el fin de semana, se llevó a cabo un servicio bautismal especial en la playa para cuatro nuevos miembros de la Iglesia, incluida una mujer que aprendió sobre la Iglesia a través de las redes sociales y recibió sus lecciones de forma remota de los misioneros.
Desde sus primeras reuniones con un pequeño grupo de dos o tres familias en La Habana, la Iglesia ha crecido en Cuba a medida que las personas comparten el evangelio con familiares, amigos y vecinos. Hoy, la Iglesia cuenta con unos 400 miembros organizados en tres ramas y un grupo que conforman el Distrito Habana Cuba.
El élder Soares dio una bendición especial de amor y protección a los miembros en Cuba, para que reconozcan al Salvador Jesucristo en sus vidas y sigan adelante con fortaleza para servir como verdaderos discípulos “con gozo en sus corazones”.
“Que Él les bendiga para perseverar y les ayude a tener esperanza en el evangelio de Jesucristo, donde puedan encontrar la paz necesaria”, dijo el élder Soares.
Reuniones con autoridades cubanas y otros líderes religiosos
El élder Soares es el tercer apóstol en visitar Cuba. Le precedieron el élder David A. Bednar en febrero de 2012 y el élder Jeffrey R. Holland en junio de 2014, donde organizó la segunda rama de la Iglesia en el país (en inglés).
El informe de la Sala de Prensa de la Iglesia en el Caribe dijo que la agenda del élder Soares incluía reuniones con líderes gubernamentales en Cuba — incluyendo el jefe de la Oficina de Asuntos Religiosos — donde discutieron el progreso de la Iglesia.
“Esta ha sido una reunión muy positiva”, dijo el élder Soares al salir de la reunión. “La Iglesia va avanzando con pasos firmes y nos sentimos muy optimistas respecto al futuro”.
El élder Soares llegó al país con su esposa, la hermana Rosana Soares, y el élder Eduardo Gavarret, Setenta Autoridad General y presidente del Área Caribe, y su esposa, la hermana Norma Gavarret. Visitaron varias organizaciones humanitarias y socios religiosos que trabajan con la Iglesia para ayudar a los necesitados en la isla, especialmente después de los recientes huracanes.
Los líderes también realizaron una cena interdenominacional, a la que asistieron varios líderes religiosos para fortalecer los lazos y construir relaciones más cercanas.
El reverendo padre Ariel Suárez Jáuregui, subsecretario de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba, comentó: “Este ha sido un afable encuentro entre hermanos, en el que hemos podido disfrutar un espíritu fraterno de cordialidad y afecto entre aquellos que profesamos la de fe de Cristo y que esperamos sea el primero de muchos en el futuro”.
La visita del élder Soares a Puerto Rico
Antes de visitar Cuba, el élder y la hermana Soares fueron a Puerto Rico por primera vez. Los acompañó el élder Carl B. Cook, de la Presidencia de los Setenta, y su esposa, la hermana Lynette Cook.
El élder Soares dijo que fue una experiencia extraordinaria reunirse con miembros, misioneros y líderes de la Iglesia en la isla.
“Reconocemos el poder que el Evangelio ha traído a sus vidas, por medio de su obediencia y dedicación. Es un país maravilloso, una isla que tiene muchos recursos y con muchas personas buenas, amables y simpáticas”, dijo el élder Soares a la Sala de Prensa del Caribe en un artículo publicado primero en español.
En una reunión el 9 de noviembre en la Capilla de Guaynabo transmitida a todas las estacas de Puerto Rico, el élder Soares elogió el talento y la gracia de sus miembros para la música y el canto, y provocó la risa de la audiencia cuando dijo: “Voy a hablar con el [presidente Russel M. Nelson] sobre el Coro del Tabernáculo, porque ya encontramos un sustituto excelente en Puerto Rico. ¡Gracias por esta hermosa música!”.
Invitó a la audiencia a emular el ejemplo del presidente Nelson.
“Nunca conocí a una persona más bondadosa y de sentimientos más tiernos que los que alberga el presidente Nelson; él es una persona sumamente paciente y amorosa. Yo también quiero seguir su ejemplo”, dijo el élder Soares.
Al hacer referencia a las dificultades que han tenido que enfrentar los puertorriqueños en los últimos años por inundaciones, huracanes y otros desastres naturales, advirtió sobre la importancia de no perder el enfoque ante las dificultades y tentaciones que puedan surgir “a causa de un mundo confundido y atribulado” , pero que hay que “seguir las enseñanzas del profeta con buen ánimo, fe y disposición, y luego confiar en que podremos contar con el poder de Dios en nuestras vidas para enfrentar los desafíos”.
Al final de su mensaje, pronunció una bendición especial para los presentes y para todo el pueblo de Puerto Rico, a quienes invitó a “permanecer y edificar el reino de Dios en su propio país”.
La hermana Soares habló sobre cumplir las promesas hechas a Dios para recibir sus bendiciones y cultivar tradiciones familiares rectas. También habló sobre la necesidad de la Iglesia y su importancia en “la mejora, el progreso y la felicidad de todos los hijos de Dios”.
El élder Cook recordó las promesas hechas por el presidente Nelson durante su visita a la isla en septiembre de 2018 (en inglés) después del huracán María, donde dijo que “se avecinan días mejores para el pueblo de Puerto Rico”. Un mes después, el presidente Nelson anunció un templo para San Juan (en inglés) en la conferencia general de octubre de 2018.
El élder Cook agregó, “El presidente Nelson ha dicho: ‘Les prometo que aumentar el tiempo que pasan en el templo bendecirá su vida como nada más puede hacerlo’. Testifico que así es”.
El élder Soares y el élder Cook, junto con sus esposas y otros líderes del Área Caribe, también participaron en una reunión especial con todos los misioneros de tiempo completo que sirven en la isla.
Y visitaron Plaza Las Américas en San Juan para ver la exposición “Mi Familia. Mi Gente”, una presentación de historia familiar patrocinada por la Iglesia que ayuda a los visitantes a encontrar el origen de su apellido, los recursos de FamilySearch y otras herramientas para comenzar su propia historia familiar. Se extenderá hasta el 26 de noviembre.