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La Estaca JAS de Washington D.C. planea un evento benéfico para ayudar a 1500 familias

Más de 300 voluntarios de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, Lazera Ministries y Good360 distribuyeron donaciones a aproximadamente 7700 personas

El segundo evento anual de distribución desde el auto de Stock the Block el 22 de junio atrajo a más de 1500 familias cerca de Washington, D.C., para recibir donaciones y otros servicios de organizaciones sin fines de lucro locales.

Los miembros del comité de Stock the Block, formado por congregaciones locales de jóvenes adultos de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días y Lazera Ministries, organizaron el evento de distribución comunitaria de este año.

“Nos asociamos con organizaciones sin fines de lucro locales para ayudar a proporcionar tanto servicios como artículos necesarios para ayudar a las familias de nuestra comunidad”, dijo Tiffany Osborn, presidenta del Comité Stock the Block.

Sobre la base de una familia media de cinco personas, el comité Stock the Block calcula que 7700 hombres, mujeres y niños se beneficiarán de las donaciones distribuidas.

Los voluntarios entregan suministros de higiene el 22 de junio de 2024 a los destinatarios en el evento de distribución comunitaria Stock the Block en Alexandria, Virginia. | Rebecca Lane

“Cuando las personas están en medio de la pobreza y en medio de la marginación, sus hijos están experimentando eso”, dijo Yolonda Earl-Thompson, directora ejecutiva de Lazera Ministries. “Sólo queremos llevar un poco de alegría por un ratito para que el niño pueda ser un niño”.

“Cuando la gente se encuentra en medio de la pobreza y la marginación, sus hijos experimentan eso”, afirma Yolonda Earl-Thompson, directora ejecutiva de Lazera Ministries. “Sólo queremos llevar un poco de alegría en un pequeño momento para que el niño pueda ser niño”.

Las donaciones fueron proporcionadas principalmente por Good360, una organización sin fines de lucro con sede en Old Town Alexandria, Virginia, y por la Iglesia. Los artículos donados incluyeron artículos de higiene personal, artículos de limpieza, pañales, calcetines, útiles escolares y juguetes para niños.

Romaine Seguin, directora ejecutiva de Good360, dijo que la misión de la organización es cerrar la brecha de necesidades entre los bienes y servicios que las personas tienen y los que no tienen.

El evento de distribución comunitaria Stock the Block “da esperanza [a los miembros de la comunidad]”, dijo Seguin. “Este es un día para brindar a nuestras comunidades un apoyo sostenible, para que puedan seguir adelante y mejorar sus vidas”.

Los receptores de las donaciones condujeron por un corredor de suministros a ambos lados mientras los voluntarios ayudaban a cargar sus automóviles. Para quienes no tenían acceso a un vehículo, podían recibir la ayuda en un centro sin cita previa. Un servicio de transporte gratuito también viajó por las comunidades vecinas, recogiendo a las personas, llevándolas a través de las colas y devolviéndolas a sus hogares con sus donaciones.

Miembros del Comité Stock the Block posan para una fotografía el 22 de junio de 2024, cerca de su sitio de donación en Alexandria, Virginia. | Provided by Stock the Block committee

Miembros del comité Stock the Block se asociaron con el Departamento de Policía del Condado de Fairfax y otros servicios comunitarios y organizaciones del Condado de Fairfax para brindar servicios adicionales y difundir información sobre el evento en las comunidades locales.

Los más de 300 voluntarios que ayudaron en el evento eran principalmente de la Estaca JAS Sur de Washington D.C. con alrededor de 60 misioneros del área de la Misión Sur de Washington D.C. Enfrentaron temperaturas que alcanzaron los 90 grados para ayudar a dirigir el tráfico, distribuir productos y brindar servicios de traducción a quienes los necesitaban.

“Si bien el evento de hoy estuvo dirigido en gran medida por miembros de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, no fue una experiencia increíblemente religiosa”, dijo Osborn. “Pero para nosotros, todavía fue una experiencia sagrada porque pudimos edificar y servir en la manera en que lo haría nuestro Salvador. No sólo vimos milagros, también sentimos Su presencia y Su amor a favor de las personas que nos rodean. Hacemos esto porque amamos a Jesucristo y Jesucristo nos ama, y aceptamos nuestra responsabilidad de reflejar ese amor a todos los hijos de Dios”.

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