Los miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en Perú respondieron al llamado de servir a los demás en sus comunidades en mayo.
Los miembros de la Estaca Santa Patricia, Lima Perú donaron sangre el sábado, 7 de mayo a beneficio del Instituto Nacional de Salud del Niño San Borja. El evento de donación se llevó a cabo en el edificio del Barrio La Molina Vieja en el distrito La Molina.
Dos niñas que son pacientes en recuperación visitaron la donación de sangre para agradecer personalmente a los voluntarios, informó la Sala de Prensa de la Iglesia en Perú.
Los organizadores señalaron cómo una unidad de sangre puede salvar tres vidas. Tenían el lema, “Ama, Dona, Vive porque Salvar Vidas está en tus Venas”.
Una semana después, 80 voluntarios de la Estaca Chaclacayo, Lima Perú se presentaron para donar sangre durante una jornada de donación de sangre para el Hospital Emergencia Ate Vitarte del Ministerio de Salud. El evento se llevó a cabo en el edificio del Barrio Ñaña del distrito de Chaclacayo.
El hospital y la estaca coordinaron la jornada explicando que “donar sangre es donar vida”, y los voluntarios mostraron su disposición de ayudar a los pacientes que lo necesitan, dice el informe de la Sala de Prensa de Perú.
Ese mismo fin de semana, voluntarios de Manos que Ayudan con chalecos y camisas amarillas de la Iglesia de Jesucristo pintaron cercas y limpiaron y quitaron papeles pegados a los postes en un día de servicio en el distrito de La Molina de Lima.
El proyecto de servicio duró desde las 8:00 h hasta las 12:00 h y fue en respuesta a una invitación de la Red de Voluntarios de La Molina, que es una colaboración vecinal de ciudadanos que trabajan para mejorar la comunidad, dijo la Sala de Prensa de Perú.
Los voluntarios de Manos que Ayudan también ayudaron a limpiar y plantar árboles con la Red de Voluntarios de Comas, en el distrito de Comas de Lima el 13 de mayo. Otro informe en la Sala de Prensa de Perú explicó cómo la actividad de servicio mejoró y embelleció el sector del distrito.
Los voluntarios de la Iglesia se unieron a más de 20 representantes de varias organizaciones de voluntarios en el distrito, mostrando su deseo de mejorar su comunidad a través de su servicio.