A medida que miles de misioneros regresan a casa en respuesta a la pandemia de COVID-19 y debido a las restricciones cambiantes que hay en varios países respecto de los extranjeros, muchos están sufriendo reducciones o alteraciones en su período de servicio de formas inesperadas.
En un esfuerzo por ayudar a satisfacer las necesidades de estos misioneros que regresan — muchos de los cuales se encuentran en un momento inesperado de limbo o transición a la vida normal — BYU-Pathway Worldwide anunció la semana pasada una nueva tasa de matrícula con descuento para misioneros que regresen o hayan regresado en los últimos cinco años.
Gracias a los fondos de becas, donados generosamente al programa de educación en línea de la Iglesia, los misioneros retornados o que estén por regresar ahora pueden recibir un 25 % de descuento en su matrícula a lo largo de los tres semestres del programa PathwayConnect, explicó JD Griffith, vicepresidente de administración de BYU-Pathway Worldwide.
El año pasado, BYU-Pathway anunció que todos los misioneros retornados serían pre-aprobados para ingresar al programa PathwayConnect. Sin embargo, este año, ya que miles de misioneros se encuentran en terreno desconocido, los administradores de BYU-Pathway querían encontrar otra manera de ayudar a la repentina cantidad de misioneros retornados que necesitan algo práctico, espiritual y educativo para continuar su desarrollo y crecimiento personal luego de su regreso del campo misional.
“Estamos muy enfocados en estos misioneros que están recibiendo su relevo antes de lo esperado”, explicó Griffith. Sin embargo, la tasa de matrícula con descuento también estará disponible para todos los misioneros que hayan retornado dentro de los últimos cinco años, dijo él.
“Desde una perspectiva personal, tengo un hijo que regresó antes debido a algunos problemas de salud y entiendo la importancia de involucrar a un joven adulto en algo constructivo tan pronto como sea posible”, dijo. Muchos de los misioneros que regresen este año llegarán a casa antes de lo esperado y, en algunos casos, no estarán preparados con un plan para la universidad o los siguientes pasos a seguir.
Para Summer Frandsen, que sirvió una misión en Cincinnati, Ohio y regresó a casa el julio pasado, la transición del servicio misional de tiempo completo a la vida normal se hizo más fácil por medio de su participación en el programa PathwayConnect.
La transición de tener un horario estricto cada día a llegar a casa y tener poca o ninguna estructura horaria puede ser difícil, dijo. Pero PathwayConnect ofrece una forma de mantenerse conectado y enfocado en el evangelio a la vez que se aprenden habilidades de vida prácticas y valiosas.
“Cuando regresas de la misión, es muy fácil distraerte por el mundo”, dijo ella. “Regresas sin poder ver con claridad. Pero con PathwayConnect, puedes aprender cosas que en verdad no sabías que necesitabas aprender … es muy útil sentirse así de conectado”.
A medida que los misioneros regresen y completen su período de autoaislamiento de 14 días para protegerse contra la posible propagación del coronavirus, BYU-Pathway ofrece una opción única dentro de la educación de la Iglesia para que los misioneros se mantengan ocupados y continúen su progreso personal de forma remota y virtual.
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“Queremos ayudar a estos misioneros con algunas de las dificultades de llegar a casa antes de lo esperado y quizá ayudar a los padres o a quienquiera que los ayude con la matrícula al alivianar el peso de esa tarifa inicial y facilitar que comiencen”, dijo Griffith. “Incluso si solo quieren hacer uno o dos semestres, esos créditos de PathwayConnect se pueden transferir a otras universidades de la Iglesia, para que no sea tiempo perdido. El programa es virtual, tienen la oportunidad de refugiarse en su hogar, tomar una clase en línea y tener algo para hacer todos los días”.
A fin de asegurarse de que este esfuerzo sea beneficioso no solo a corto plazo para quienes regresan antes de la misión, sino también a largo plazo para los misioneros retornados que están buscando una oportunidad de continuar su educación, los administradores de BYU-Pathway han estado trabajando estrechamente con el Departamento Misional de la Iglesia.
Desde esta época el año pasado, las cartas que detallan la fecha de partida de un misionero, las cuales reciben en sus portales misionales virtuales antes de regresar a casa, han incluido información sobre la elegibilidad automática de los misioneros retornados para inscribirse en el programa PathwayConnect. Sin embargo, en las próximas semanas, esas cartas se actualizarán e incluirán, además, información sobre el descuento de la matrícula, dijo Griffith. Y por supuesto, aquellos que ya han sido relevados o regresado a casa también son elegibles para el beneficio en la matrícula.
Esperamos que una oferta como esta brinde algo positivo a estos misioneros al regresar a casa durante esta época difícil, añadió Griffith.
Este esfuerzo de becar la matrícula con un descuento ha estado en prueba piloto en algunas partes del mundo durante casi un año, explicó el presidente Clark Gilbert, presidente de BYU-Pathway Worldwide.
“Tuvimos una gran respuesta a nuestros esfuerzos pilotos de becas para misioneros retornados durante el año pasado”, dijo él. “Ahora, con tantos misioneros retornados que se ven afectados por el COVID-19, decidimos acelerar el programa para ayudar a todos los misioneros retornados y sus familias a tener una ventaja”.
El próximo semestre de PathwayConnect comienza el 20 de abril y la inscripción ya está abierta. La fecha límite prioritaria para inscribirse es el 31 de marzo, pero el registro y la inscripción estarán disponibles hasta la fecha de comienzo del nuevo semestre. El nuevo semestre abarcará desde el 20 de abril hasta el 23 de julio.
Opciones de educación del SEI disponibles para misioneros retornados recientemente:
- PathwayConnect
- Título de grado en línea por medio de BYU-Pathway/BYU-Idaho
- Campus del SEI (cursos en línea durante el verano)
- Instituto