La presidencia del Área Europa de la Iglesia anunció el jueves pasado que el Templo de Roma, Italia cerraría a partir del viernes, 6 de marzo, en respuesta a las preocupaciones sobre la propagación del virus COVID-19. Este será el quinto templo que cierra la Iglesia en respuesta al coronavirus.
La Iglesia también publicó información actualizada sobre los misioneros en Corea, que incluye la noticia de que los misioneros no nativos regresarán a sus hogares para pasar por un período de aislamiento antes de ser reasignados. La Iglesia ha suspendido los viajes a seis países.
Previamente, estaba planificado que el Templo de Roma, Italia cerrara el 21 de marzo para su mantenimiento y limpieza anual, pero la presidencia de área expresó su deseo de cambiar la fecha de cierre para cumplir con las directivas del gobierno italiano de cerrar universidades, escuelas y otros lugares donde se realizan reuniones numerosas para ayudar a prevenir la continua propagación del coronavirus.

En su declaración, publicada el miércoles, 5 de marzo en el sitio web de Newsroom en italiano, la presidencia de área resaltaba que el templo aún estará disponible para realizar una cantidad limitada de ordenanzas por los vivos, previamente agendadas, durante las próximas semanas antes de la fecha de cierre original.
La presidencia de área declaró que se anunciará una fecha para la reapertura del Templo de Roma más adelante.
El Templo de Roma abrió sus puertas tan solo el año pasado, en marzo, luego de ser dedicado por el presidente Russell M. Nelson.
El élder Alessandro Dini Ciacci, un setenta de área de Italia, dijo que las reuniones dominicales de la Iglesia del 8 y 15 de marzo se han cancelado. Los barrios tendrán la opción de transmitir una breve reunión sacramental o, donde eso no sea posible, reunirse en los hogares para estudiar el evangelio.
“Las palabras ‘centrado en el hogar y apoyado por la Iglesia’ han tomado un nuevo significado y están probando ser una bendición a medida que la ausencia de reuniones físicas en edificios de la Iglesia se equilibra con la instrucción espiritual en el hogar”, dijo él.
“El tiempo extra que tienen las familias ahora que las escuelas cerraron durante unas semanas ofrece a nuestros niños y jóvenes una gran oportunidad de trabajar en sus metas espirituales, intelectuales, físicas y sociales, y también de enfocarse en prepararse para la conferencia general al estudiar los relatos de la Primera Visión, encontrar maneras creativas de compartir el evangelio con otros, y seguir la invitación del presidente Nelson de ‘Escucharlo’ y de comprender cómo cada uno de nosotros Lo escuchamos individualmente”.
Los miembros, misioneros y ciudadanos de Italia están “de buen ánimo”, dijo el élder Dini Ciacci, y “la vida continúa en su mayoría como de costumbre, sin demasiadas interrupciones”.
Otros templos que cerraron en respuesta al virus son el Templo de Taipéi, Taiwán; el Templo de Seúl, Corea; el Templo de Fukuoka, Japón; y el Templo de Sapporo, Japón. Los Templos de Hong Kong, China y de Tokio, Japón cerraron antes del brote del virus debido a trabajos de reconstrucción.
Tal como se mencionó en un artículo reciente de Deseret News, las congregaciones en el estado de Washington también han comenzado a tomar medidas para prevenir la propagación de la enfermedad al cancelar los servicios de adoración y las actividades de la Iglesia. Estas cancelaciones también se corresponden con los pedidos recientes del gobierno de cancelar o posponer las reuniones numerosas que no sean imprescindibles.
Actualmente, los servicios de adoración para miembros de la Iglesia se han cancelado en 17 países, incluidas partes de los Estados Unidos.
En Italia, unas 3.858 personas han sido infectadas y 148 han muerto, según un informe de Euronews. La enfermedad respiratoria ha provocado 12 muertes dentro de los Estados Unidos, y se han informado más de 98.000 casos en todo el mundo. Como en ocasiones anteriores, la Iglesia está tomando las precauciones necesarias para ayudar a proteger a sus miembros y misioneros a fin de evitar la propagación de la epidemia.
En un anuncio de las oficinas generales de la Iglesia en Salt Lake City, Utah, solo una semana antes de la declaración de la presidencia del Área Europa, la Iglesia explicaba que “las preocupaciones respecto del COVID-19 (coronavirus) han atraído mucha atención pública y han provocado cambios significativos en los viajes, las interacciones personales y las pautas prescritas por los funcionarios de salud sobre cómo abordar la creciente preocupación”.
Actualización sobre los misioneros que se irán de Corea y los viajes de la Iglesia
El 6 de marzo, la Iglesia publicó información actualizada respecto de los misioneros que se irán de Corea. Todos los misioneros que no son nativos de Corea se marcharán y regresarán a sus hogares antes de partir hacia nuevas asignaciones temporales en sus propios países.

Los misioneros que se irán de Corea ya han estado en aislamiento y evitado contacto con personas fuera de sus apartamentos.
Los futuros misioneros que se preparan para servir en Corea o que provengan de Corea pospondrán su fecha de inicio o recibirán una asignación temporal.
El viernes, Corea del Sur informó 505 casos adicionales del virus COVID-19, según un reporte de AP.
Con base en las recomendaciones de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CCPEEU), la Iglesia ha suspendido todos sus viajes comerciales y misionales desde y hacia China, Hong Kong, Irán, Italia, Japón y Corea del Sur.
También se alienta a los empleados de la Iglesia a evitar otros viajes que no sean imprescindibles, según una actualización de Newsroom.