Desde reuniones con solo unas pocas personas en la década de 1970, luego comenzando oficialmente en 1993 con 30 personas, la membresía de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en Camerún ha crecido y la Iglesia ha establecido su primera estaca en el país africano.
El élder Paul B. Pieper, Setenta Autoridad General y primer consejero en la presidencia del Área África Central, y el élder Charden Ndinga, Setenta de Área en el Área África Central, organizaron a los miembros el 1 de junio, según informó la Sala de Prensa de la Iglesia en África.
Al organizar la estaca, el élder Pieper proclamó en la capital del país, Yaundé, que “desde este día y para siempre, esta estaca será un estandarte donde la luz de Dios se extenderá a todo Camerún y más allá. Será una luz para esta nación”.
Este hito histórico para Camerún muestra que el evangelio se está extendiendo por todo el mundo, dijo el presidente Pascal Thierry Onana, el presidente de estaca recién sostenido de la Estaca Yaundé Camerún.
Las raíces del evangelio en Camerún se remontan a 1974, según explica la sección de historia global de la Iglesia para el país (en inglés). La primera reunión sacramental se llevó a cabo con pocas personas presentes. Luego, entre 1979 y 1989, los cameruneses bautizados en otros países regresaron a Camerún (en inglés) y comenzaron a realizar reuniones. En enero de 1993, la Iglesia estableció (en inglés) la Rama Bastos.
Para cuando el gobierno reconoció formalmente la Iglesia en agosto de 1993, la rama había crecido a 30 miembros con al menos 90 personas asistiendo a las reuniones.
El número de miembros se duplicó para finales de 1993, con 60 miembros registrados asistiendo.
Novecientos miembros asistieron en persona a la organización de la nueva estaca. Hay 3327 Santos de los Últimos Días en el país, según las estadísticas más recientes en ChurchofJesusChrist.org (en inglés). Los miembros han sido divididos en cinco barrios y cuatro ramas en todo el país.
“La organización ha cambiado, pero nuestra obra sigue siendo la misma: ayudar, servir, bendecir y fortalecer”, dijo el élder Pieper.
