Menú

El presidente y la hermana Worthen hablan sobre los profetas, las promesas y la logocofosis, en el devocional de BYU

El presidente de la universidad enseña cómo mejorar las resoluciones de Año Nuevo a través del Padre Celestial en el primer devocional de la universidad de 2023

PROVO, Utah — El presidente de BYU, Kevin J Worthen (en inglés), comenzó el año nuevo y el semestre de invierno con un devocional (en inglés) en el campus el martes, 10 de enero, centrado en el poder que poseen las promesas y reconociendo los sentimientos de entusiasmo, aunque inciertos, que a menudo surgen con tal novedad.

“La incertidumbre a veces puede provocar ansiedad, casi paralizante”, dijo el presidente Worthen. “Si se encuentran en esa situación, si la incertidumbre amenaza con abrumarles como nos sucede a todos de vez en cuando, los invito a que aprovechen el poder de las promesas”.

El presidente Worthen citó a Hannah Arendt, una filósofa política, quien explicó que las promesas permiten a los seres humanos organizar su futuro. Expuso que creer que las promesas son confiables permite la confianza y el orden en las relaciones, “ya sean económicas, políticas o íntimas”.

El presidente de BYU, Kevin J Worthen, habla durante el primer devocional del año nuevo en el Marriott Center en Provo, Utah, el 10 de enero de 2023. | Christi Norris, BYU

Si bien el comienzo de un año es un tiempo habitual para las resoluciones o las auto promesas, el presidente Worthen señaló que, para muchas personas, estas son las promesas menos confiables. Esto se debe a que la responsabilidad recae en el individuo, lo que hace más fácil romper la promesa.

Alentando la idea de esforzarse por mejorar constantemente, el presidente Worthen sugirió que las promesas hechas por Dios son “más seguras y, por lo tanto, más poderosas”. Él enseñó: “Debido a que Dios es perfectamente honesto y todopoderoso, no hay posibilidad de que Sus promesas, Sus palabras no se cumplan”.

Sin embargo, esto significa que, para recibir las bendiciones de tales promesas, una persona debe hacer su parte. Cuando esto sucede, Dios está obligado a cumplir la promesa.

Un patrón en las promesas

Dado que las promesas tienen tanta importancia, el presidente Worthen dijo que ha prestado especial atención a las promesas hechas por el Profeta y los Apóstoles. Hacerlo le permitió darse cuenta de un patrón de tres partes que tiene lugar dentro de cada promesa:

  1. La expresión directa y específica.
  2. La identificación de los requisitos previos para obtener las bendiciones.
  3. La descripción de las bendiciones prometidas.

El presidente Worthen contó el número de promesas hechas por el presidente Russell M. Nelson durante la primera conferencia general en la que fue presidente de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. El presidente Worthen contó 17 promesas que siguen el patrón.

El presidente de BYU, Kevin J Worthen, habla durante el primer devocional del año nuevo en el Marriott Center en Provo, Utah, el 10 de enero de 2023. | Christi Norris, BYU

El presidente Worthen explicó que al estudiar las promesas hechas por el Profeta y los Apóstoles y ejecutar la acción requerida, se producirá un cambio notable dentro de uno mismo.

“Al participar en este proceso, tomen nota especial de las diferentes acciones que deben realizar para recibir las diferentes bendiciones”. El presidente Worthen dijo que algunas promesas se relacionan con la adoración en el templo, mientras que otras se centran en la revelación personal. Algunas incluso se basan unas en otras.

El presidente Worthen señaló que al principio puede ser abrumador ver los requisitos previos como una lista de cosas por hacer para obtener la bendición. Sin embargo, dijo, Dios está deseoso de bendecir. “El cumplimiento de cualquiera de estos requisitos previos es suficiente para obtener la bendición prometida”. Se puede mejorar a través de otros prerrequisitos previos.

Teniendo en cuenta las promesas y las bendiciones, uno debe recordar que los milagros ocurren, ya sean grandes o pequeños. El presidente Worthen enseñó que las promesas proféticas sugieren cómo uno puede reconocer mejor esos milagros y beneficiarse de ellos.

Experiencia personal

Compartió una experiencia personal de cuando estaba teniendo un día difícil. Él y su esposa, la hermana Peggy S. Worthen (en inglés), habían hecho una cita en el templo semanas antes y recordaron la exhortación del presidente Nelson en un discurso de conferencia de no solo hacer una cita para el templo, sino de asistir a la cita con “exactitud y alegría”.

Después de la sesión de investidura, el presidente y la hermana Worthen hablaron sobre las tiernas misericordias que habían experimentado durante la sesión. Una de ellas tuvo lugar cuando dos estudiantes de BYU se presentaron y expresaron su gratitud por los esfuerzos que los Worthen hacen por BYU.

Al salir, el presidente Worthen pensó que debía escribir un nombre en la lista de oración y notó su nombre en el bloc de notas, que por lo general él no lee los apuntes de otros. Reconoció que algunos pueden referirse a la situación como una coincidencia.

Sin embargo, dijo: “Para mí fue un milagro, uno que Dios sabía que necesitaba y que, de acuerdo con la promesa del presidente Nelson, Dios proporcionó”.

La hermana Peggy Worthen habla durante el primer devocional del nuevo año en el Marriott Center en Provo, Utah, el 10 de enero de 2023. | Christi Norris, BYU

Logocofosis

La hermana Worthen introdujo su mensaje enseñando sobre la “logocofosis”, una incapacidad para comprender el lenguaje hablado. Ella compartió una historia de una entrevista de trabajo en la que el empleador se extendió explicando el puesto. Ella se esforzó por prestar atención, y cuando él terminó de hablar, ella le preguntó si le estaba hablando a ella.

A pesar de no obtener el trabajo, la hermana Worthen reconoció haber experimentado logocofosis durante la entrevista, y cómo costaba comprender el lenguaje hablado. Ella enseñó que, para lograr el éxito, se debe combatir la logocofosis.

“Lo más importante es que debemos superar la logocofosis espiritual para convertirnos en mejores discípulos de Cristo”, dijo ella. “En otras palabras, si sufrimos de logocofosis espiritual, no podemos alcanzar la exaltación sin superar ese desafío y convertirnos en mejores oyentes”.

La hermana Worthen dijo que, en lugar de preguntar a Dios si Él nos está hablando, cuando Dios y Sus profetas hablan, esto debe ser asumido.

Ya sea que la logocofosis espiritual se produzca porque una persona se siente demasiada cómoda o demasiada centrada en las distracciones, esta provoca la pérdida de oportunidades. Para vencer la logocofosis espiritual, explicó la hermana Worthen, uno debe prestar atención constante y deliberada a las palabras de Dios.

Ella testificó: “A medida que nos esforcemos por interiorizar y seguir el consejo que [Dios] da a través de las Escrituras, a través de los profetas vivientes y a través de la revelación personal, tendremos éxito en la escuela, en el trabajo y en nuestra búsqueda de la perfección”.

HISTORIA RELACIONADA
El calendario de los devocionales y foros de invierno de BYU incluirá a 2 apóstoles y otros 3 líderes de la Iglesia
BOLETÍN
Reciba los aspectos destacados de Church News gratis en su bandeja de entrada semanalmente. Escriba su dirección de correo electrónico a continuación.