El 11 de febrero de 1975, Belle Smith Spafford se dirigió a un grupo de estudiantes de la Universidad Brigham Young. Encantada de que fue presentada como una “mujer joven”, la hermana Spafford, que entonces tenía 80 años, recordó haber recibido una llamada del Consejo Nacional de Mujeres. Se le pidió que aceptara un nombramiento como delegada en una reunión internacional en París.
“Pensé, ‘Antes de aceptar esto, debo remitirlo a uno de los miembros de la Primera Presidencia’”, recordó ella. “Así que llamé al presidente [N. Eldon] Tanner y dije: ‘Tengo una invitación para servir como delegada, y no creo que deba aceptarla por esto y esto y esto. Tenía varias razones buenas, pensé”.
El presidente Tanner escuchó atentamente y luego respondió: “Sabe, yo pienso que debería aprovechar sus oportunidades mientras aún es joven”.
La hermana Spafford murió siete años después a los 87 años.
Sirviendo como presidenta general de la Sociedad de Socorro de 1945 a 1974, ella supervisó, entre muchas responsabilidades, la construcción del Edificio de la Sociedad de Socorro en la sede de la Iglesia y la traducción de la Revista de la Sociedad de Socorro al español. Durante su servicio, la Sociedad de Socorro se multiplicó por nueve — de 100 000 miembros a 900 000.
Como tantos en la Iglesia, ella consagró cada aliento de vida al Señor.
Al presidente Gordon B. Hinckley, líder de la Iglesia hasta su muerte a los 97 años, se le preguntó acerca de la edad de los principales líderes de la Iglesia durante una entrevista que se emitió el 7 de abril de 1996 con Mike Wallace del programa “60 Minutos” de CBS (en inglés).
“Hay quienes dicen: ‘Esto es una gerontocracia. Esta es una Iglesia dirigida por ancianos’”, dijo Wallace.
“¿No es maravilloso tener a la cabeza a un hombre maduro, un hombre de juicio que no se deja llevar por todo viento de doctrina?” dijo el presidente Hinckley.
“Absolutamente, siempre y cuando no esté loco”, dijo Wallace.
“Gracias por el cumplido”, bromeó el presidente Hinckley.
El jueves, 14 de abril de 2022, el presidente Russell M. Nelson superó al presidente Hinckley como el presidente de mayor edad de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
El presidente Nelson tomó un breve momento para posar para una fotografía en su oficina un día antes. La fotografía en sí es extraordinaria, porque el presidente Nelson nos ha hecho pensar a todos que su servicio hasta bien entrada la décima década es algo común y corriente.
En sus cuatro años y medio como Presidente de la Iglesia, el presidente Nelson ha viajado 185 074 km a 35 naciones en seis continentes, reuniéndose con líderes gubernamentales y religiosos y Santos de los Últimos Días en entornos grandes y pequeños, y ha guiado a la Iglesia a través de la pandemia de COVID-19, ministrando en su lugar a través de videoconferencias y transmisiones en línea. Pidiendo a los Santos de los Últimos Días que recojan a Israel en ambos lados del velo, el presidente Nelson ha anunciado 100 nuevos templos, incluyendo 17 en la reciente conferencia general de abril de 2022. Y en diciembre de 2020 se convirtió en tatarabuelo (en inglés).
Él celebrará su 98° cumpleaños, el 9 de septiembre.
Este mes, el presidente Dallin H. Oaks también celebra un hito importante. El primer consejero de la Primera Presidencia cumplirá 90 años el 12 de agosto.
Dos días después, el presidente Nelson, el presidente Oaks y el presidente Henry B. Eyring participarán en la rededicación del Templo de Washington D.C.
Luego, en mayo de 2023, el presidente Eyring, segundo consejero de la Primera Presidencia, celebrará sus 90 años.
Además, el presidente M. Russell Ballard, presidente en funciones del Cuórum de los Doce Apóstoles, cumplirá 94 años el 8 de octubre.
Rara vez observo a nuestros líderes y su servicio activo sin asombro. No es lo que están haciendo bien en su décima década lo que me sorprende, es por qué lo están haciendo.
Durante una celebración de 2019 que marcó el 95° cumpleaños del presidente Nelson, él compartió su testimonio de Jesucristo y de Su Iglesia restaurada.
“Si he aprendido algo cierto en [mi vida], es que Jesús el Cristo es el Hijo de Dios”, dijo él. “Su Iglesia ha sido restaurada en estos últimos días a fin de preparar al mundo para Su segunda venida. Él es la luz y la vida del mundo. Solo a través de Él podemos alcanzar nuestro destino divino y la exaltación final”.
El mes pasado, el presidente Oaks y su esposa, la hermana Kristen Oaks, viajaron a Roma, Italia, para dirigirse a la Cumbre de Libertad Religiosa de Notre Dame. Él ofreció un discurso de apertura y participó en otras sesiones de la conferencia. Cuando los asistentes a la conferencia visitaron el Museo del Vaticano y la Capilla Sixtina, el presidente y la hermana Oaks también fueron, caminando una distancia considerable. Regresaron de Roma e inmediatamente manejaron a una reunión familiar.
Sospecho que el presidente Oaks habló con el presidente Nelson antes de aceptar la invitación de viajar a Italia para hablar sobre la libertad religiosa.
Tal como el presidente Tanner aconsejó una vez a la hermana Spafford, el presidente Nelson probablemente escuchó atentamente y luego respondió con un sentimiento familiar.
“Sabes”, podría haber dicho, “yo pienso que deberías aprovechar tus oportunidades mientras aún eres joven”.