El recogimiento de Israel en los últimos días depende en gran medida de los misioneros de tiempo completo que no solo ayudan a otros a convertirse al evangelio de Jesucristo, sino que también se convierten a sí mismos, dijo el élder Marcus B. Nash, Setenta Autoridad General y director ejecutivo del Departamento Misional.
“Su deber primordial es ayudar a cada misionero a ‘convertirse al Señor’ a través de su experiencia misional”, dijo el élder Nash, hablando en el día de apertura del Seminario para Nuevos Líderes de Misión 2022 el jueves, 23 de junio en el Centro de Capacitación Misional de Provo.
Citó al élder David A. Bednar, del Cuórum de los Doce Apóstoles, quien definió la conversión como “un cambio en las creencias, el corazón y la vida de una persona para aceptar y ajustarse a la voluntad de Dios e incluye el compromiso consciente de convertirse en un discípulo de Cristo”.
3 principios de la conversión
El élder Nash repasó tres principios del “milagro de la conversión”.
Primero, crean. Crean que el Padre Celestial vive y que cada misionero es un hijo amado de Dios llamado a servirle; que Jesús es el Cristo, el Hijo del Padre viviente; y que José Smith fue y es un profeta de Dios.
Segundo, permanezcan en el camino correcto. Doctrina y Convenios 35:24 subraya la importancia de los mandamientos y convenios: “Guardad todos los mandamientos y convenios que os ligan; y haré estremecer los cielos para vuestro beneficio, y Satanás temblará, y Sion se regocijará sobre los collados y florecerá”.
Tercero, conozcan y confíen en Dios. “Cuando un misionero hace cosas misionales como un medio para buscar a Cristo, llegará a conocerlo y a confiar en Él, porque ese misionero experimentará la presencia y el poder de Cristo”, dijo el élder Nash.
5 maneras para creer, permanecer y confiar
El élder Nash también compartió cinco consejos para ayudar a los misioneros a creer, permanecer en el camino correcto y conocer y confiar en Dios.
1. ‘Predicad Mi Evangelio’ proporciona la estructura, el orden y las habilidades necesarias para la conversión: pónganlo en práctica.
“No es necesario reinventar la rueda proverbial”, dijo el élder Nash, y agregó, “Cuanto más ejerzan los misioneros la autodisciplina para vivir lo que se da en ‘Predicad Mi Evangelio’, más aumentará su conversión al Señor”.
2. La obediencia es más poderosa cuando los misioneros comprenden la doctrina y aprenden a aplicar los principios del evangelio.
“La obediencia se vuelve más dispuesta y decidida cuando el misionero entiende el ‘por qué’ de la doctrina y aprende por esfuerzo y experiencia a aplicar los principios con el ‘por qué’ en mente”, dijo el élder Nash, citando “Predicad Mi Evangelio” que “Si la verdadera doctrina se entiende, ello cambia la actitud y el comportamiento”.
Lea más resúmenes de los discursos y vea las fotos del Seminario para Nuevos Líderes de Misión 2022 aquí
3. Cada misionero es un individuo — la manera más efectiva de influir en ellos es uno a uno.
Al señalar que los misioneros provienen de circunstancias distintas y variadas, el élder Nash alentó a los nuevos líderes de misión a “tratar de comprender por medio del Espíritu dónde se encuentra cada misionero y ayudarlo a crecer a partir de ahí”.
4. La conversión a Cristo es la responsabilidad personal de cada misionero.
Citó al presidente Russell M. Nelson: “La verdad es que ustedes deben hacerse responsables de su propia conversión; nadie más puede hacerlo por ustedes. Les ruego que se hagan cargo de su propio testimonio. Trabajen para conseguirlo; háganse responsables de él. Cuídenlo, nútranlo de manera que crezca, aliméntenlo con la verdad. … Practiquen la oración humilde, sincera y diaria. Nútranse con las palabras de los profetas antiguos y modernos”.
5. Es necesario que haya oposición en todas las cosas — ayuden a sus misioneros a preverla y no se dejen sorprender por ella.
“La oposición y la dificultad son parte de la vida misional”, dijo el élder Nash. “Algunos ven la oposición como una razón para retroceder cuando, en cambio, la oposición es una oportunidad. La oposición nos da la oportunidad de ejercer el albedrío sabiamente y crecer”.
Señaló que tres parejas de líderes de misión que asistieron al seminario se habían enfrentado a la oposición cuando buscaban obtener visas hace varios meses. Fueron encarcelados injustamente y permanecieron allí durante días, sin cama, sin alimentos comestibles y sin agua potable.
“¿Que hicieron?” preguntó el élder Nash. “Ellos oraron, predicaron el evangelio a sus compañeros de celda, dieron bendiciones y cantaron himnos. Fueron agentes, no objetos”.
Invitación y promesa
“Ayuden a cada misionero a creer, ayuden a cada uno a permanecer en el camino correcto y ayuden a cada uno a conocer y confiar en Dios”, invitó el élder Nash, y agregó que esos misioneros, como Alma y otros en las Escrituras, “experimentarán y probarán el gozo supremo, se convertirán y nacerán de Dios, y serán llenos del Espíritu Santo.
“Tales misioneros verán a otros nacidos de Dios, que probarán como los misioneros probaron. Estos serán apoyados bajo pruebas y problemas de todo tipo y llegarán a conocer y confiar en Dios. Serán cambiados. Serán convertidos y transformados. Serán discípulos de Cristo poderosos, pacientes, persistentes, constructores de familias eternas y del reino de Dios”.