Después de un año de que Jenae Nelson (en inglés) estuviera haciendo un estudio con los profesores Sam Hardy y Dianne Tice de la Universidad Brigham Young, sobre el tema de ‘estar en deuda’, ella descubrió el poder de sentirse en deuda y cómo esto es diferente del sentido de la obligación.
Al estar decidiendo qué investigar durante su tiempo en el posgrado en BYU, Nelson se sintió inspirada un día a leer Lucas 7,que habla de una mujer que limpia los pies del Salvador con su cabello y lágrimas en señal de gratitud. Nelson, sin embargo, se dio cuenta de algo diferente acerca de esta interacción.
Siguiendo esta historia, Cristo da una parábola sobre la deuda que llevó los pensamientos de Nelson a Mosíah 2 sobre el sermón del rey Benjamín sobre estar en deuda. Fue entonces cuando Nelson hizo la conexión de que quizás el estar en deuda juega un papel vital en la conversión de uno.
Después de realizar una encuesta entre los estudiantes de BYU, a Nelson le intrigó que, si bien la mayoría no estaban de acuerdo con las palabras “estar en deuda”, la respuesta a las preguntas sobre sentirse incapaz de pagarle a Dios fue abrumadoramente un “Sí”. En otras palabras, aunque la mayoría de la gente no afirmó sentirse en deuda, los estudiantes, de hecho, sintieron precisamente eso.
Entonces, ¿por qué es tan relevante el estar en deuda? “Reconocer su deuda con Dios cultiva la gratitud. Vienen juntos. Vienen de la mano”, dijo Nelson en un podcast reciente de Church News. “Es realmente difícil separarlos y los sentimientos de gratitud, obviamente, le hacen sentirse bien. Le hacen feliz”.
Episodio 89: Investigadora Santo de los Últimos Días sobre cómo cultivar el agradecimiento y el estar en deuda con Dios aumenta la felicidad en general (en inglés)
Nelson explicó que si bien la gratitud es buena, el estar en deuda puede tener más significado. Las personas pueden enumerar cosas por las que están agradecidas, tal vez objetos que han logrado por medios personales, y esto altera las estructuras neuronales en su cerebro y aumenta la felicidad.
Sin embargo, el estar en deuda conecta al individuo con Dios, haciéndolo menos egocéntrico. Nelson dijo que en lugar de solo estar agradecido por algo, estar agradecido con alguien da un sentido de deuda. Ella dijo: “Todo lo que tienen es un regalo y eso cambia la forma en que interactúan con el mundo entero”.
En un estudio reciente, Nelson descubrió resultados interesantes al separar el estar en deuda y la gratitud. Se invitó a las personas a escribir una lista de cosas por las que estaban agradecidos o a escribir una carta de “agradecimiento” a Dios por lo que tenían en sus vidas.
Nelson dijo que aquellos que simplemente escribieron una lista de agradecimiento “no mostraron tanta generosidad prosocial y tampoco mostraron tanto, de lo que llamamos, respuesta empática. En otras palabras, no sintieron tanta compasión, ni el estar en deuda”.
Como madre de cuatro hijos, Nelson espera que sus hijos comprendan esta idea de estar en deuda por sí mismos. Ella desea que puedan separar las ideas de sentirse agradecido y ser una persona agradecida. Esto ha impactado la forma en que ella interactúa con sus hijos y les enseña, concentrándose en el Padre Celestial y lo que Él ha hecho por Sus hijos.
Para incorporar estas ideas en la propia vida, Nelson animó a otros a decir oraciones de acción de gracias y a enfocarse en lo que el Padre Celestial ha hecho por el individuo y universalmente, como la Creación y la Expiación de Jesucristo. Invitó a todos a buscar los pequeños milagros que Dios da cada día y a escribir estas tiernas misericordias.
“Esas cosas realmente ayudarán a magnificar la virtud de la gratitud que estamos experimentando en nuestra vida”, dijo ella.
Nelson dijo que la gratitud debe centrarse en la bondad del Padre Celestial, en lugar de las cosas que tenemos en nuestra posesión, porque Él es inmutable y constante, lo que significa que nuestro agradecimiento y deuda también pueden ser constantes.
“Estamos eternamente en deuda con Él, pero eso es una manifestación de Su amor por nosotros, que Él estaría dispuesto a tener esta relación asimétrica con nosotros, donde claramente Él da mucho más de lo que le damos, pero Él está de acuerdo con eso, porque Él nos ama”, dijo Nelson.
Aun así, también es importante reconocer que Dios obra a través de otros, explicó Nelson. Esto luego manifiesta la gratitud hacia aquellos en la vida, fortaleciendo las relaciones, ya sean maestros, padres, líderes u otros.
Manifestarlo también da como resultado un mayor sentido de dar, como se encontró en la investigación de Nelson. Los estudiantes que habían sentido un mayor nivel de deuda con Dios también dieron más dinero a la caridad, ayudaron a los enfermos y necesitados, prepararon más comidas para los de sus congregaciones y otras actividades similares.
“Ha sido un gozo el saber lo que significa el estar en deuda, que no tenemos que rehuir esta idea”, dijo Nelson, “porque es contracultural, pero que en realidad puede enriquecer y profundizar nuestra vida religiosa y me ha traído mucho gozo personal y espero que eso también pueda traer gozo a otros.