Por segundo año consecutivo, la celebración cultural latina anual de la Iglesia — “Luz de las Naciones” — será un evento virtual.
La decisión de presentar el amado programa en un formato virtual fue influenciada, por supuesto, por la pandemia en curso. Durante años, legiones de Santos de los Últimos Días latinos y sus amigos se reunían en el Centro de Conferencias para disfrutar, en persona, de música conmovedora y baile y escuchar mensajes con temas de Cristo.
Si bien la iteración de 2021 de “Luz de Las Naciones” no se transmitirá en vivo, el espectáculo debe continuar. El programa pregrabado se transmitirá el sábado, 20 de noviembre y se puede ver en la página de transmisión en vivo de la Iglesia y en YouTube a partir de las 7 p.m. Hora de la montaña.
El tema de este año es “Una luz para todos” y contará con un elenco de cientos de bailarines, cantantes y otros artistas latinos que son Santos de los Últimos Días y amigos de la fe.
El próximo programa virtual “Luz de Las Naciones”, que una vez más está diseñado para cultivar la unidad entre vastas comunidades latinoamericanas, concluirá con un mensaje pregrabado del élder D. Todd Christofferson, del Cuórum de los Doce Apóstoles.
El amor y la admiración del élder Christofferson por América Latina y su rica y diversa cultura son bien conocidos. Sirvió una misión de tiempo completo en Argentina cuando era joven y continúa utilizando sus habilidades en el idioma español en una variedad de asignaciones eclesiásticas.
El popular evento anual se originó en 2002. La versión 2020 fue un recordatorio del amplio alcance del programa. La audiencia fue alta en América, incluyendo Estados Unidos y Canadá, y Europa.
Las representaciones virtuales de “Luz de Las Naciones” de 2021 se rodaron en una variedad de lugares de Utah. Espere ver una influencia latina urbana moderna en algunos de los nuevos números musicales.
Las raíces de “Luz de Las Naciones” se remontan a la década de 1920, cuando los misioneros comenzaron a predicar en español entre los mexicanos que vivían en Salt Lake City. En un año, se organizó una misión y dos años después de eso, se creó una pequeña rama de habla hispana cuando familias de América Latina y España emigraron a Salt Lake City.
Para 1960, esta rama había crecido y se conocía como el Barrio Lucero.
Desde el principio, los líderes de la Iglesia alentaron a los miembros del Barrio Lucero a desarrollar sus talentos. Los líderes locales organizaron grupos para ayudar a los jóvenes a cultivar confianza en el canto, el baile y representaciones teatrales. Uno de estos grupos actuó en la celebración del centenario de la Iglesia de 1930 en el Tabernáculo.
Los programas de danza y música ayudaron a estos Santos de los Últimos Días a preservar su cultura y transmitir su idioma a la próxima generación. Otras congregaciones de Santos de los Últimos Días en busca de entretenimiento cultural para sus reuniones sociales comenzaron a solicitar entretenimiento de “Fiesta Mexicana” en las cenas de barrio. Los miembros del barrio aprovecharon estas oportunidades para recaudar fondos para una nueva capilla.
La abundancia de talento cultivado a través de estas actuaciones se transmitió a generaciones futuras y, finalmente, ayudó a producir lo que ahora es “Luz de Las Naciones”.