En 2021, uno de los mejores golfistas del mundo publicó en Instagram (en inglés), acerca de jugar una ronda de golf con un miembro del Cuórum de los Doce Apóstoles de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
El famoso golfista fue Gary Player (en inglés) apodado “El Caballero Negro” y a menudo mencionado como uno de los “Tres Grandes” golfistas de su época, junto a Arnold Palmer y Jack Nicklaus. El nativo de Johannesburgo, Sudáfrica, ha ganado más de 160 torneos profesionales y obtuvo nueve victorias en campeonatos importantes durante varias décadas. Tiene una larga lista de logros y premios de golf, incluyendo su incorporación al Salón de la Fama del Golf Mundial.
El 25 de junio de 2021, Player estuvo encantado de pasar tiempo en el campo de golf Red Ledges en Heber Valley, Utah, con el élder Dieter F. Uchtdorf.
“Tuve el placer de jugar una ronda de golf con el élder Dieter F. Uchtdorf. Uno de los más distinguidos hombres que he conocido”, escribió Player en Instagram. “Es un hombre de principios del que todos podemos aprender, y es seguro decir que soy un gran admirador suyo. He sido tocado e inspirado por sus palabras de fe y sabiduría. En el mundo de hoy necesitamos más personas como él”.
Player no es un miembro bautizado de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, pero se ha asociado con otros líderes de la Iglesia, escuchó conferencias generales, a menudo citó al presidente Gordon B. Hinckley en sus discursos y a asistido a reuniones sacramentales en todo el mundo.
¿Cuál es su principal conexión con la Iglesia?
Su hija Amanda-Leigh Player Hall (en inglés) y su difunta esposa, Vivienne Player, se unieron a la Iglesia de Jesucristo en la década de 1990.
“Mi papá siempre ha sido un gran hombre de fe”, dijo Hall, su hija. “Él es un buen hombre. Ama los principios del evangelio y tiene una fe profunda en Jesucristo. Lo veo de rodillas todos los días y todas las noches. Aunque yo soy el miembro, él es un gran ejemplo para mí y tengo mucho que aprender de él”.
Encontrando la Iglesia
Algunos de los primeros contactos de la familia Player con la Iglesia se produjeron a través de amigos. Player jugó en el PGA Tour con otra leyenda del golf y Santo de los Últimos Días Billy Casper (en inglés), siendo él mismo un converso a la Iglesia. “Eran buenos amigos”, dijo Hall.
Otra de las pasiones de su padre son las carreras de caballos. Su entrenador y jinete favorito también eran miembros de la Iglesia.
Además, la mejor amiga de Hall en la escuela secundaria era Santo de los Últimos Días. Durante esos años de formación, sabía que faltaba algo en su vida y sintió que la religión podía llenar ese vacío. Su amiga la invitó a la Iglesia varias veces y finalmente le presentaron a los misioneros de tiempo completo en Johannesburgo.
Mientras uno de los misioneros sostenía un rotafolio que representaba a José Smith arrodillado en la Arboleda Sagrada, Hall sintió una poderosa manifestación del Espíritu Santo.
“Tuve esta increíble experiencia. Este sentimiento me invadió y recuerdo estar llorando”, dijo. “No sabía lo que estaba sintiendo, pero nunca olvidaré cómo me sentía. Nunca he sido capaz de negar eso”.
Hall siguió reuniéndose con los misioneros y decidió bautizarse.
Le preocupaba decírselo a sus padres. No era un secreto que estuviera investigando a la Iglesia, pero Hall había escuchado historias sobre algunas familias que no apoyaban. Procrastinó contárselo a sus padres hasta que finalmente una noche entró en su habitación y les dio la noticia.
“Nunca los había acorralado así. Estoy segura de que estaban pensando que abandonaría la escuela o que tomaría una decisión terrible para mi vida”. “Ella dijo: ‘Me voy a bautizar’. Ellos me dijeron: ‘Es una gran noticia’. Me apoyaron mucho, y creo que fue por sus amigos que eran miembros de la Iglesia”.
Poco después de informar a sus padres, Hall se bautizó en el Barrio Sandton, que ahora forma parte de la Estaca Johannesburgo Norte de Sudáfrica.
Hall se enteró de que antes de que ella naciera, los Casper habían hecho arreglos para que sus padres hablaran con los misioneros y su madre se había mostrado muy interesada.
La conversión de su madre
Después del bautismo de Hall, su madre, Vivienne Player, a menudo visitaba su dormitorio universitario y tomaba una copia de la última revista de la Iglesia que estaba en la mesita. Estableció un patrón de lectura de los materiales de la Iglesia y de hacer muchas preguntas.
Vivienne Player comenzó a asistir a la Iglesia con Hall. Leyó un libro sobre los principios del Evangelio. Leyó “Jesús el Cristo” de James E. Talmage. Ella pidió su propio set de escrituras.
“Ella leyó todo lo que le di”, dijo Hall.
Después de que Hall se graduó de la universidad, trabajó en California durante un año. Su madre vino a verla y visitaron a los Casper que vivían en San Diego. También, madre e hija visitaron los terrenos del Templo de San Diego, California, y su madre le dio una noticia sorprendente.
“Estábamos sentadas afuera, y ella dijo: ‘He decidido bautizarme’”, dijo Hall.
Su padre apoyó que su esposa se uniera a la Iglesia, pero tenía algunas inquietudes. Hall dijo que el élder Dennis E. Simmons, Setenta Autoridad General que en ese entonces servía en la presidencia de área y era amigo cercano, le dió sabios consejos y le ayudó a resolver sus inquietudes.
Vivienne Player se bautizó dos meses antes de que Amanda-Leigh partiera a su misión.
“Esto fue una gran bendición para ella. Le dio un gran propósito”, dijo Hall.
Hablando español en Nueva Jersey
Mientras trabajaba y vivía sola en California, Hall asistió a Instituto y comenzó un estudio profundo de las Escrituras y el evangelio de Jesucristo, que resultó en algunas experiencias espirituales notables.
“Tuve estas increíbles experiencias personales con el Señor y sabía que si podía cambiar la vida de una persona como la mía había sido cambiada, esa era la experiencia que quería”, dijo. “Decidí enviar mis papeles de la misión”.
Si la hubieran llamado a algún país lejano como India o Mongolia, su padre se habría negado. Afortunadamente, no fue un problema. Hall fue asignada a la Misión Morristown de Nueva Jersey.
Se sintió fuertemente impulsada a comenzar a aprender español e inicialmente se decepcionó cuando no la llamaron como misionera de habla hispana. Luego, en su primera noche en el campo misional, su presidente de misión, el presidente Boyd R. Poulton, Sr., le dijo que su asignación había cambiado — sería una misionera de habla hispana.
“Solo lloré”, dijo ella. “Aprender español en el campo misional fue difícil, pero se sentía bien y amaba a la gente de habla hispana. Desde entonces ha sido una bendición increíble en mi vida”.
‘Nada más que admiración por la Iglesia’
En la actualidad, Hall y su familia viven en el área de Filadelfia, Pensilvania, donde continúa sirviendo en la Iglesia, cuida de su familia y es presidenta y directora ejecutiva de la Fundación Gary y Vivienne Player (en inglés), que se esfuerza por lograr un cambio positivo en la vida de los niños vulnerables y desfavorecidos de todo el mundo.
Su madre falleció en agosto de 2021 después de una larga batalla contra el cáncer de páncreas.
A los 87 años, el padre de Hall todavía juega al golf, hace ejercicio varias veces a la semana, viaja, hace presentaciones y habla en eventos.
Curiosamente, Hall no había jugado al golf con su padre hasta hace poco, cuando él le regaló su primer juego de palos de golf por su 50 cumpleaños. Debido a que el golf era un tema discutido en todas las comidas familiares mientras crecía, Hall optó por jugar al tenis, un deporte en el que se destacaba.
“Pongámoslo de esta manera — tengo un largo camino por recorrer, pero definitivamente tengo buenos genes”, dijo Hall sobre su juego de golf en desarrollo. “Ciertamente no he vencido a mi papá en el golf, pero podría vencerlo en el tenis”.
Si bien extrañan a su esposa y madre, se sienten bendecidos por la influencia del Evangelio y los buenos amigos en sus vidas.
Cuando Gary Player se dio cuenta de lo feliz que estaba su esposa y del impacto positivo que el Evangelio tenía en su hija y su familia, vivir el Evangelio se convirtió en una forma de vida y unió más a la familia.
“No tengo nada más que admiración por la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días”, dijo Player a Church News. “No soy miembro de la Iglesia, pero obviamente soy un gran partidario y embajador. He conocido a tantas personas maravillosas que hacen tanto por las personas necesitadas”.
Durante el inicio de la pandemia de COVID-19, Player vivió con la familia de Hall y participó en las lecciones de “Ven, sígueme”. Ha aceptado invitaciones para hablar en las reuniones de la Iglesia. Espera escuchar los mensajes inspiradores en la conferencia general y tiene en alta estima a todos los misioneros, sabiendo que el servicio misional ha bendecido a su hija y nietos.
Muchos han preguntado si Player alguna vez se bautizará. Hall dice que han tenido muchas charlas al respecto.
“Lo hemos intentado con todas nuestras fuerzas”, dijo con una sonrisa comprensiva.
Ella dijo que el presidente Hinckley una vez le preguntó a su padre cómo se sentía acerca de la Iglesia.
“Mi papá dijo: ‘Creo que soy mucho mejor misionero sin ser miembro de la Iglesia’. El presidente Hinckley dijo: ‘Bueno, Gary, siempre existe el arrepentimiento en el lecho de muerte’. A mi papá le encantó eso. El presidente Hinckley tenía un gran sentido del humor”, dijo Hall.