A mediados del siglo XIX, el élder George Q. Cannon tradujo el Libro de Mormón al hawaiano con la ayuda de los nativos hawaianos Jonathan Nāpela y J.W.H. Kauwahi. Pero solo se encuadernaron unos pocos cientos de copias antes de que las páginas impresas restantes fueran destruidas en un incendio.
Esto significaba que no se podían encuadernar copias adicionales, lo que hacía que la primera edición hawaiana del Libro de Mormón, Ka Buke a Moramona en hawaiano, fuera extremadamente rara, informó la Sala de Prensa de la Iglesia en el Pacífico (en inglés).
Es por eso que el élder Brooks Haderlie, quien trabajó como archivista de la universidad en BYU–Hawái, quería saber cuántas copias existen aún.
Antes de servir como misionero de historia de la Iglesia en Australia, el élder Haderlie, con la ayuda de su esposa, la hermana Laurie Haderlie, hizo un inventario de todas las copias públicas de cada edición de Ka Buke a Moramona que aún existen.
Ellos descubrieron que, a partir de 2022, 15 bibliotecas tienen un total de solo 22 copias de la primera edición de 1855.
El élder Haderlie dijo que Ka Buke a Moramona era solo el quinto idioma al que se tradujo el Libro de Mormón del inglés, y fue la primera edición en un idioma no europeo.
“Observar la evolución de la traducción al hawaiano permitirá que otros habitantes de las islas del Pacífico aprecien las traducciones posteriores del Libro de Mormón a sus propios idiomas, y tal vez los estimule a investigar cómo surgieron esas traducciones para que las personas pudieran aprender en su propio idioma”, dijo.
El élder Haderlie agregó que quienes vean el Libro de Mormón en hawaiano de 1855 en el Centro de visitantes del Templo de Laie, Hawai (en inglés), “pueden apreciar el tesoro que es”.
Desde el 2021, los hablantes de hawaiano han tenido acceso al Libro de Mormón, Doctrina y Convenios y la Perla de Gran Precio en su propio idioma a través de la Biblioteca del Evangelio.