Lanzar la pelota a la canasta equivocada durante un torneo nacional de baloncesto de la escuela secundaria fue vergonzoso, pero le enseñó al élder Kelly R. Johnson, un Setenta Autoridad General, una importante lección para su vida.
“He aprendido que debo tener cuidado y no distraerme o perder la concentración en las cosas que más importan”, les dijo el élder Johnson a los estudiantes de la Universidad Brigham Young durante el devocional semanal del campus el martes, 15 de marzo.
Explicó que, antes de lanzar la pelota, se había sentido intimidado por la presión y el lenguaje ofensivo de un jugador del equipo rival, y perdió la concentración en las cosas más importantes del juego.
“Si no tenemos cuidado, podemos distraernos fácilmente y desviar nuestras energías hacia cosas menos importantes. Una de las tácticas favoritas de Satanás es distraernos con cosas aparentemente buenas, [pero] que nos alejan de las mejores cosas”, dijo el élder Johnson.
El élder Johnson habló sobre cómo las distracciones y la falta de concentración pueden ocurrir por varias razones. Las distracciones no tienen que ser malas para afectarnos. Las redes sociales, los complicados horarios de los estudios y del trabajo, y otras cosas pueden alejar a alguien de Cristo y de la senda del convenio.
“Les pido que consideren esta pregunta: ¿Cuáles son las cosas que los distraen de mantenerse enfocado en las cosas más importantes?, dijo el élder Johnson.
La geometría fractal
Cuando el élder Johnson y su esposa, Terri, tenían cinco niños pequeños, él además servía como presidente de estaca y trabajaba largas horas como contador forense. Cada aspecto de su vida era abrumador y caótico, hasta que la observó a través de la lente de la geometría fractal — un concepto de formas o patrones sin fin o repetitivos. Se dio cuenta que, a medida que ajustaba y planeaba cada aspecto de su vida, ésta, en general, cambiaba y se volvía más organizada y centrada.
“El élder Richard G. Scott hizo esta poderosa afirmación: “Llegamos a ser lo que queremos ser, al ser constantemente, cada día, lo que queremos llegar a ser”, dijo el élder Johnson.
Él invitó a los estudiantes a estudiar la teoría de la geometría fractal y aplicarla a un aspecto de sus vidas. Si el objetivo es la vida eterna, dijo, una persona tiene que comenzar a hacer todos los días las cosas que le permitirán alcanzarla, es decir, guardar los mandamientos, llegar a ser como Cristo, hacer convenios, recibir ordenanzas y perseverar hasta el fin.
“Ustedes se encuentran en este maravilloso momento de la vida en el cual están tomando decisiones y haciendo cosas para avanzar hacia el futuro”, dijo el élder Johnson. “Les pido que tomen en serio el consejo que se encuentra en una hermosa escritura en Proverbios 4:26: “Examina la senda de tus pies, y sean establecidos todos tus caminos”.
“Testifico que, si se detienen y piensan en las cosas que realmente quieren lograr en el futuro, y luego comienzan a hacer, cada día, las lo que es necesario para cumplir ese deseo, lograrán [el] resultado anhelado”.
Dediquen tiempo al Señor y síganlo
El élder Johnson dijo que el profeta, el presidente Russell M. Nelson, ha dado un consejo muy oportuno sobre cómo evitar las distracciones y mantenerse enfocado en lo más importante — dedicar tiempo al Señor todos los días.
“Cuando oigo al profeta del Señor suplicar que haga algo, escucho”, dijo el élder Johnson. “El consejo [que nos da el] profeta para que superemos las distracciones y permanezcamos enfocados es dedicarle tiempo al Señor todos los días”.
El Salvador hizo una súplica similar, explicó el élder Johnson, en la forma de una invitación — “Ven, sígueme”. El élder Johnson dijo que, en realidad son dos invitaciones. La primera es venir a Cristo, y la segunda que lo sigamos.
Él citó ejemplos de las escrituras cuando Jesucristo pidió a la gente que dejara algo antes de venir a Él y seguirle, como en Mateo 4:18-22, cuando Pedro, Andrés, Santiago y Juan dejaron sus redes y le siguieron. También está la historia del joven rico, que no quiso renunciar a sus posesiones (ver Mateo 19:16-22 y Marcos 10:17-22).
“¿A qué distracciones tienen que renunciar para realmente venir a Él, para poder seguirlo diligentemente? Algunos deben abandonar la lujuria, otros la pornografía, otros, tal vez, los juegos de azar, algunos deberán renunciar a otras distracciones”, dijo el élder Johnson.
Namaan, en 2 Reyes 5, quería elegir cómo, dónde y qué se podía hacer para sanarlo de la lepra. Cuando finalmente siguió al profeta y se lavó siete veces en el río Jordán, se curó.
El élder Johnson dijo: “Quiero enfatizar que, si realmente queremos venir al Salvador y seguirlo, no podemos escoger lo que dejamos. Tenemos que renunciar a cualquier cosa que nos distraiga y nos impida venir al Salvador verdaderamente y seguirlo”.
Establezcan lo que van a hacer diariamente
Todo el mundo se enfrenta a momentos decisivos en su vida, dijo el élder Johnson. Sin embargo, tienen que hacer todos los días las tareas que les ayudarán a alcanzar esas cosas que quieren lograr. Y tienen que renunciar a aquellas cosas que les impiden acercarse al Salvador y seguirlo.
Los discípulos y los seguidores del Salvador finalmente tuvieron que tomar una decisión con respecto al Salvador, quién era Él y si iban a continuar siguiéndolo, dijo el élder Johnson. Dijo que obtiene fortaleza de la respuesta de Simón Pedro: “Señor, ¿a quién iremos?, porque el Salvador es el camino de regreso al Padre Celestial.
El élder Johnson se despidió de los estudiantes con una invitación a reflexionar sobre la dirección que están tomando sus vidas y a determinar si están haciendo todos los días las cosas que realmente los llevan adonde quien ir o que les permitirán convertirse en lo que quieren ser.
“Determinen a qué distracciones tienen que renunciar para venir verdaderamente al Salvador y seguirle. Entonces hagan esas cosas, y les testifico que al hacerlas diariamente, lograrán todo lo que Dios quiere que alcancen”, dijo el élder Johnson.