Resumen del discurso:
Debido a que Jesucristo ha resucitado de entre los muertos, todos volverán a vivir después de la muerte. “Este conocimiento da sentido y propósito a nuestras vidas”. Al avanzar con fe, podemos soportar cualquier dificultad.
Cuando eran una pareja joven, los padres del élder Palmer perdieron a su hija Ann de 17 meses, lo que les causó un dolor indescriptible. “También provocó un anhelo de respuestas a las preguntas más importantes de la vida”.
Años más tarde, los misioneros de la Iglesia comenzaron a enseñarles verdades del Libro de Mormón y la Biblia, incluyendo “la doctrina única y notable de que las familias pueden estar unidas para siempre por la misma autoridad del sacerdocio que Jesucristo le dio a su apóstol principal, Pedro”.
Sus padres reconocieron la verdad, recibieron un testimonio del Espíritu y se bautizaron, y su familia fue sellada en el templo. “Muchos años después, papá me dijo que, si no fuera por la trágica muerte de Ann, nunca habría sido lo suficientemente humilde como para aceptar el Evangelio restaurado”.
Todos los que sienten dolor, luchan con la duda o se preguntan qué pasa después de la muerte, son invitados a tener fe en Cristo. “Les prometo que si desean creer, luego actúan con fe y siguen los susurros del Espíritu, encontrarán gozo en esta vida y en el mundo venidero”.
