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En estos tiempos ‘excepcionales’, graduados de BYU–Hawái enseñan que pueden hallar fuerza duradera en verdades eternas

El presidente de BYU–Hawái, John S.K. Kauwe III, y su esposa, Mónica, interactúan con el graduado de BYU-Hawái Terrence A. Dela Peña y su familia antes de participar de la transmisión de la ceremonia de graduación el sábado, 17 de abril de 2021. Crédito: Joshua Sanchez, BYU-Hawái
El presidente de BYU–Hawái, John S.K. Kauwe III, y su esposa, Mónica, interactúan con los graduados que participan de la transmisión de la ceremonia de graduación el sábado, 17 de abril de 2021. Crédito: Joshua Sanchez, BYU-Hawái
El élder Timothy J. Dyches, setenta autoridad general, habla durante la transmisión de la ceremonia virtual de graduación de BYU-Hawái el sábado, 17 de abril de 2021. Crédito: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
El presidente de BYU–Hawái, John S.K. Kauwe III, habla durante la transmisión de una ceremonia virtual de graduación el sábado, 17 de abril de 2021. Crédito: Joshua Sanchez, BYU-Hawái
R. Kelly Haws, asistente del comisionado del Sistema Educativo de la Iglesia, habla durante la transmisión de una ceremonia virtual de graduación el sábado, 17 de abril de 2021. Crédito: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
El presidente de BYU–Hawái, John S.K. Kauwe III, y su esposa, Mónica, interactúan con los graduados que participan de la transmisión de la ceremonia de graduación el sábado, 17 de abril de 2021. Crédito: Joshua Sanchez, BYU-Hawái

Durante el último año, los estudiantes de BYU–Hawái han enfrentado muchas interrupciones en su educación. La universidad costera ubicada en Laie, Hawái, que incluye un extenso cuerpo estudiantil internacional, canceló las clases presenciales y realizó una transición a un modelo de aprendizaje principalmente remoto durante gran parte de la pandemia.

En la ceremonia de graduación del sábado —el cuarto evento virtual de ese tipo en la universidad — el élder Timothy J. Dyches, setenta autoridad general, les dijo a los 254 graduados de BYU–Hawái que han demostrado ser “maleables, adaptables y excepcionales”.

Tal como el apóstol Pablo le escribió a Timoteo: “‘[Han] peleado la buena batalla, [han] acabado la carrera, [han] guardado la fe. Por lo demás, [les] está reservada [una] corona’ (2 Timoteo 4:7-8) o, quizás, un título”, dijo el élder Dyches.

Los “tiempos excepcionales” que enfrentaron los estudiantes en el último año pueden ser solo una de las muchas complicaciones que pueden encontrar en los días futuros, señaló el élder Dyches. “Esta nueva normalidad puede ser el prólogo de nuevas normalidades aún más desafiantes, cada una con un potencial impacto sísmico en ustedes y sus planes”.

Los graduados deben edificar y desarrollar la resiliencia espiritual sobre un fundamento firme, dijo, y citó Helamán 5:12: “Y ahora bien, recordad, hijos míos, recordad que es sobre la roca de nuestro Redentor, el cual es Cristo, el Hijo de Dios, donde debéis establecer vuestro fundamento, para que cuando el diablo lance sus impetuosos vientos, […] esto no tenga poder para arrastraros al abismo de miseria y angustia sin fin, a causa de la roca sobre la cual estáis edificados”.

El élder Dyches citó el lema de la Universidad Washington en San Luis, Misuri, donde asistió, —“Per Veritatem Vis” o “mediante la verdad, fortaleza”— y testificó que hay fortaleza duradera en las verdades eternas.

Él alentó a los graduados a llevar una vida que invite a la compañía del Espíritu Santo, quien afirmará lo que es verdad y lo que no lo es.

El élder Timothy J. Dyches, setenta autoridad general, habla durante la transmisión de la ceremonia virtual de graduación de BYU-Hawái el sábado, 17 de abril de 2021.
El élder Timothy J. Dyches, setenta autoridad general, habla durante la transmisión de la ceremonia virtual de graduación de BYU-Hawái el sábado, 17 de abril de 2021. | Crédito: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días

Satanás tentará a las personas a “[llamar] a lo malo […] bueno, y a lo bueno, malo” (Isaías 5:20). “Conforme obedezcan y guarden los mandamientos, y ‘anden en las ordenanzas del Señor’ el Espíritu Santo los guiará y protegerá de los continuos engaños de Satanás”, prometió el élder Dyches.

La oposición y las pruebas de la vida son inevitables, continuó diciendo el setenta autoridad general. 

Quienes pongan primero las cosas espirituales y mantengan una recomendación para el templo vigente de manera fiel podrán mantener su brújula moral, prometió. “En cada decisión que sea posible, ‘buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas’” (Mateo 6:33).

El élder Dyches pidió a los graduados que recuerden tres importantes verdades eternas del evangelio.

Primero, “existe un poder en las ordenanzas y los convenios, y el honrarlos y guardarlos predecirá su destino final”. 

Segundo, “con determinación diaria, manténganse cerca del Señor y del Espíritu Santo”.

Tercero, la maldad nunca traerá felicidad. “En verdad, el amor de Dios por sí solo no puede eliminar las consecuencias eternas del pecado. Solo la fe, el arrepentimiento y su obediencia a los mandamientos de Dios puede activar ese poder limpiador y redentor de la Expiación infinita de Cristo por ustedes. Es mejor prepararse y prevenir que reparar y arrepentirse”, dijo él.

El élder Dyches dijo que el Padre Celestial ha intervenido en muchos momentos críticos a lo largo de su vida. “Al mirar atrás, no hubiera cambiado de lugar con nadie más. […] Las pruebas y los contratiempos son parte de esta vida. Ustedes pueden hacer cosas difíciles”.

A modo de conclusión, el élder Dyches dijo: “Ruego que el Señor los bendiga a lo largo de sus vidas, que sus recuerdos de BYU–Hawái traigan a su mente, en los años por venir, la bendición de un conocimiento y verdad crecientes que viene acompañada de manera única con el testimonio firme y en desarrollo de Jesucristo y Su Expiación”, concluyó el élder Dyches. “Per Veritatem Vis” — “mediante la verdad, fortaleza”.

El presidente de BYU–Hawái, John S.K. Kauwe III, habla durante la transmisión de una ceremonia virtual de graduación el sábado, 17 de abril de 2021.
El presidente de BYU–Hawái, John S.K. Kauwe III, habla durante la transmisión de una ceremonia virtual de graduación el sábado, 17 de abril de 2021. | Crédito: Joshua Sanchez, BYU-Hawái

En sus comentarios, el presidente de BYU–Hawái, John S.K. Kauwe III, dijo a los graduados que sus experiencias en la universidad les han brindado una preparación única para enfrentar las complejidades y desafíos del mundo. 

“Como graduados de la Universidad Brigham Young–Hawái, pueden confiar en su capacidad de prepararse y su habilidad para enfrentar cada nueva oportunidad del futuro con emoción y entusiasmo. No deben temer, porque están listos para el futuro”, dijo él.

Conforme los graduados enfrenten tiempos desafiantes, como de seguro lo harán, dijo él, “pueden tener la confianza de que están preparados y pueden volverse a nuestro Salvador, quien les brindará la fortaleza que necesitan para continuar avanzando”.

R. Kelly Haws, asistente del comisionado del Sistema Educativo de la Iglesia, preguntó a los graduados qué harían si llegaran a tomar un examen importante luego de haber estudiado y el profesor estuviera esperándolos y les diera las respuestas: “¿las usarían?”.

“¿Se imaginan ignorar las respuestas del profesor, que sabe, en favor de las respuestas que alguien más les susurró?”, dijo Haws.

A medida que los graduados dejen atrás la universidad, encontrarán “proveedores de respuestas que muchos consideran a la moda, razonables e incluso indiscutibles”, dijo él. 

Sin embargo, existen unos pocos proveedores preciosos de los que se puede depender para que siempre nos brinden respuestas confiables, dijo Haws. “Nuestro Padre Celestial es un Dios de verdad, no puede mentir, y los ama perfectamente. Consideren lo que eso significa. Ustedes y yo podemos confiar en Él y en Su Hijo Unigénito con certeza absoluta. También podemos confiar en las respuestas que recibimos mediante sus portavoces ungidos”.

El Salvador conoce todas las respuestas, dijo Haws. “Si mañana tenemos la opción —y la tendremos— de elegir entre el Omnisciente y Sus apóstoles preordenados y ungidos o las respuestas populares y atractivas que suenan sofisticadas y enamoran a la multitud, ¿de qué lado nos pondremos?”.

La ceremonia del sábado reconoció a 254 graduados —243 con títulos de licenciaturas y 11 con títulos de asociados— de 30 países diferentes y 24 estados de los EE. UU.

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