Varias personas que buscaron refugio del poderoso tifón Rai que azotó el sudeste de Filipinas el jueves, 16 de diciembre, resistieron la tormenta en un centro de reuniones de los Santos de los Últimos Días.
Más de 130 personas de los pueblos de la zona de Tacloban en la isla de Leyte, se refugiaron en el Centro de la Estaca Tacloban el jueves por la mañana.
“Después de ver a estos evacuados refugiarse en nuestro centro de reuniones, reflexioné en lo que el Salvador hubiera hecho si hubiese estado aquí”, el presidente de la Misión Tacloban Filipinas, Fabian Sinamban dijo en una publicación en Facebook (en inglés). “Sé que Él estaría con ellos para consolarlos y levantarles el ánimo. Podemos seguir Su ejemplo con pequeños actos, a nuestra manera”.
Los líderes de la Iglesia y los miembros compartieron videos sobre la Navidad con la historia del nacimiento de Jesucristo. Los misioneros de la Misión Tacloban Filipinas también compartieron dos presentaciones musicales navideñas.
Las personas que se refugiaron en el centro de reuniones fueron algunas de las casi 100.000 que tuvieron que ser evacuadas antes de la tormenta, según las noticias (en inglés).
El tifón Rai se presentó con vientos sostenidos de 195 kilómetros por hora y ráfagas de hasta 270 kilómetros por hora cuando llegó a las islas orientales de Siargao.
El tifón tiene una banda de lluvia de unos 400 kilómetros de ancho y según las autoridades, unos 10.000 poblados estuvieron en su trayectoria. Los funcionarios encargados de responder en caso de desastres dijeron que se trata de una de las tormentas más fuertes que haya azotado el país este año.
A medida que la tormenta se desplazaba por las islas, los vientos del tifón Rai derribaron árboles, arrancaron techos de hojalata y dejaron sin electricidad a algunos lugares. También, el personal de la guardia costera estuvo rescatando a aquellos donde la lluvia provocó inundaciones que anegaron los pueblos.
Según las noticias (en inglés), no se reportaron víctimas o daños importantes.